(AIN) El Papa Francisco visitará esta república del Cáucaso del 24 al 26 de junio.«El pasado año, el Papa mostró su liderazgo moral cuando llamó por su nombre al genocidio perpetrado cien años antes y lo reconoció como el primer genocidio del siglo XX. Para nosotros, los armenios, esto es extraordinariamente importante». Para comprenderlo hay que entender —según subrayó el Arzobispo— la psicología de los armenios. «Durante cien años nos hemos esforzado, prácticamente sin éxito, para que se reconociera las penalidades que sufrimos. Recibimos promesas vacías de políticos y Estados, y nos convertimos en un objeto de la discordia para los diferentes intereses. Pero el Papa no es un político; es el Vicario de Cristo en la tierra; lo que le importa son la verdad y los Derechos del hombre», dijo el Arzobispo.
Y siguió exponiendo que Armenia, a pesar de su situación marginal, tiene unagran importancia para la cristiandad mundial. «Armenia fue el primer país en aceptar el cristianismo, hace más de 1.700 años. Aún hoy, nuestro pueblo está marcado por la fe. Además, a lo largo de los siglos, hemos dado a la cristiandad millones de mártires. Yo siempre digo que el pueblo judío preparó la primera venida de Cristo. Los armenios, con nuestros mártires, preparamos el camino a la segunda venida de Cristo. Damos testimonio de Cristo a todo el mundo».
La gran mayoría de la población de Armenia pertenece a la Iglesia Apostólica Armenia. La Iglesia católica armenia, unida a Roma y que procede de ella, cuenta con unos 160.000 fieles. Mons. Minassian calificó las relaciones ecuménicas entre católicos y la mayoría ortodoxa de extraordinarias. «Soy Obispo en Armenia desde hace seis años. En estos años no he tenido nunca un sentimiento de separación entre los católicos y la Iglesia Apostólica Armenia. Todo lo contrario: siempre he experimentadocooperación y simpatía. Cuando se confirmó que el Papa vendría, la cabeza visible de la Iglesia ortodoxa armenia me dijo que deseaba hacer todo lo posible para contribuir al éxito del viaje. Las relaciones entre nuestras iglesias mejorarán incluso. Estoy convencido de esto».
Según dice, las diferencias entre la Iglesia ortodoxa armenia y la católico armenia son mínimas. «Tenemos la misma fe, celebramos los mismos sacramentos y tenemos la misma liturgia. La única diferencia radica en el reconocimiento del Papa de Roma. Pero, fuera de esto, no hay diferencia. Además, los armenios —ya sean ortodoxos o católicos— se sienten como unúnico pueblo y una Iglesia». En la Iglesia católica armenia, hay una gran ilusión con el viaje del Papa, según refiere el Arzobispo. «Ya ahora tenemos más inscripciones que espacio para la Misa pública con el Papa. Por ello trasmitiremos la Misa, en pantallas gigantes, en una segunda plaza, a la que el Santo Padre acudirá después de la Misa. En total esperamos más de 50.000 participantes».Más de 300 voluntarios se ocuparán de que la celebración trascurra ordenadamente. «Se están preparando ya desde ahora con Misas y encuentros. Toda nuestra Iglesia, con sus 40 parroquias, está muy ilusionada. Esperamos que se produzca una auténtica profundización en la fe».
Según Mons. Minassian, la situación de la Iglesia en Armenia es muy diferente a la de gran parte de Europa occidental. «Aquí no hay secularismo. Los armenios son un pueblo religioso. La gente cree y esto forma parte de su identidad. Nuestra iglesia está viva, aunque no seamos muchos. Pero contamos con abundantes proyectos caritativos para pobres, ancianos y discapacitados. Como Iglesia, nuestros medios son limitados; por eso estamos muy agradecidos a «Ayuda a la Iglesia Necesitada» y a los benefactores, que nos ayudan generosamente.Deseo agradecerlo expresamente; pero en especial pido ahora oraciones para que el viaje del Papa sea todo un éxito.
«Ayuda a la Iglesia Necesitada» viene apoyando a los cristianos de Armenia desde hace años. Financia sobre todo proyectos pastorales como la formación de seminaristas y sacerdotes, así como cursos de verano para niños y jóvenes. Ahora, la Fundación apoya económicamente a la Iglesia local también en los preparativos y la realización del viaje del Papa.