(La Capital) En conferencia de prensa junto al ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, Peña destacó la celebración del 25 de Mayo «con ánimo festivo del día de la patria y la posibilidad de poder celebrarla en la catedral metropolitana, con el presidente a la cabeza».
Peña ratificó así que Mauricio Macri asistirá hoy al tradicional Tedéum, en el marco de la celebración del 206º aniversario de la Revolución de Mayo.
En ese contexto, Peña remarcó: «No vemos ningún tipo de conflictividad con la Iglesia» ya que «compartimos y suscribimos el diagnóstico que han planteado» acerca de «la fragilidad del empleo». Además, destacó que «compartimos el mensaje del Santo Padre de la importancia del encuentro, del diálogo, de la paz, de salir de una lógica de una Argentina de confrontación».
Por su parte, el legislador porteño Gustavo Vera aseguró ayer que el Papa Francisco «está molesto con el ombliguismo con el que se analizan las cosas desde la Argentina».
«Está molesto con el ombliguismo con el que se analizan las cosas desde acá. Cada gesto, cada palabra, cada homilía que hace Francico se interpreta en clave argentina. Lo que es inevitable, porque a Juan Pablo II le pasaba lo mismo con el pueblo polaco», sostuvo el referente de La Alameda. Además, señaló que «interpretar que todo lo que hace tiene algo que ver directa o indirectamente con la Argentina es perder el sentido de las proporciones».
Asimismo, el legislador destacó que «la preocupación por el trabajo, por que la gente no quede en la pobreza y tenga alimentos es una preocupación que siempre ha formado parte de la agenda histórica de la Iglesia», a la vez que subrayó que el Sumo Pontífice «no cree en la teoría del derrame».
«El tiene diálogo estrecho con alguna gente del gobierno», indicó, al tiempo que agregó que «su deseo es que los argentinos se encuentren, que puedan realizar políticas de Estado».