(Cope) El obispo de Córdoba ha criticado a quienes discuten el carácter público del conjunto monumental porque «nos introducen en un enredo para luego tener que salir y decir lo obvio». Insiste en que desde el punto de vista jurídico y legal «es indiscutiblemente de la Iglesia católica, por eso sigue viva».
En cuanto a la nomenclatura del Complejo Monumental Mezquita-Catedral de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández explica que se ha llegado a un acuerdo con el cabildo que «no afecta a nadie e incluye todo». Ha aclarado que «desde el punto de vista cultural, el cabildo es de la catedral, no de la mezquita» pero insiste en que «no hay que hacer una guerra por el nombre»
El obispo de Córdoba asegura que las cuentas de la mezquita-catedral son transparentes y que «no hay ni trampa ni cartón». Señala que el Ayuntamiento no aporta nada a su mantenimiento y que lo recaudado se destina principalmente a dicho mantenimiento y a obras sociales y de caridad. Recuerda que se han destinado más de un millón y medio de euros a becas universitarias para que los afectados por la crisis puedan terminar los estudios.
Por último, Mons. Demetrio Fernández ha manifestado que cuando llegó por primera vez a la Mezquita-Catedral «experimenté lo grande que es Dios y eso lo transmite a todo el que la visite». Insiste en que si este monumento sirve para elevar el corazón y el alma a Dios, vale la pena conservarlo y ponerlo al servicio de la sociedad».