(Padre Nuestro/InfoCatólica) En las jornadas, a las que acudió un numeroso grupo de seglares, sacerdotes y personas consagradas, se pronunciaron conferencias y comunicaciones en las que los ponentes profundizaron en diversos aspectos de la vida y el ministerio de este venerable sacerdote. La Eucaristía de cada uno de los días de estas Jornadas se clebró en la iglesia de San Bartolomé, donde reposan los restos de don. José Rivera, correspondiendo la presidencia a los obispos don Ángel Fernández Collado, don Demetrio Fernández y don Ángel Rubio, que conocieron y trataron en vida al venerable sacerdote.
Una novedad que destacó en estas Jornadas fue que, después de 25 años de su muerte, y una vez que la Iglesia lo ha declarado venerable, la figura de don José Rivera ha sido presentada desde la riqueza de sus escritos íntimos, que no fueron conocidos durante su vida. Los conferenciantes, tanto sacerdotes como seglares, abundaron en sus exposiciones en citas inéditas de su Diario y de sus Cuadernos de Estudio.
Si antes resultaba admirable la figura de don José Rivera por su actividad como maestro de vida espiritual, formador de sacerdotes y padre de los pobres, ahora resulta más admirable aún al conocer algo más de su riquísima vida interior, de su relación con las Personas divinas, de sus reflexiones íntimas, de sus modos y maneras de disponerse a responder y colaborar con la gracia de Dios, de sus ardientes deseos de santidad propia para santificar a los c más, así como de la radicalid y totalidad con que plantea todas las tareas en su ministerio.