(Cadena Ser/InfoCatólica) El arzobispo no ha podido ser más tajante: «Lo puedo decir más alto, más veces, pero no más claro». El conflicto de los bienes de las parroquias de la Franja, retenidos en el museo de Lérida, «está zanjado a favor de Aragón y hay sentencias vaticanas que lo dicen y deben cumplirse».
Mons. Omella reconoce que no ha tenido todavía contactos con el obispo de Lérida, pero afirma que «haré lo posible por solucionar este tema».
En cuanto a su receta para todos los conflictos, incluidos los políticos, pasa por «dialogar, hablar y escuchar al otro». «En los tiempos difíciles -dice Omella- el ser humano saca lo mejor de sí mismo».
Esta receta sugiere aplicarla también en la sociedad catalana y del resto de España, para encontrar salida al desafio independentista. «Hay que hablar», dice monseñor Omella, y ser cauce de diálogo y de misericordia con el otro. «Ese es mi cometido» afirma el prelado..
Al ser preguntado por su trabajo en la congregación de Obispos de Roma: «¿Le dejan trabajar al Papa Francisco para modernizar la Iglesia?», Mons. Omella, divertido con la pregunta, ha contestado: «hacemos lo que podemos, igual que los periodistas».