(AgenciaAVAN/InfoCatólica) La 38 edición del encuentro europeo de jóvenes convocado por la comunidad ecuménica de Taizé concluyó el viernes 1 de enero, en Valencia, después de cinco días de oraciones, talleres, meditaciones y testimonios compartidos por cerca de 30.000 participantes, de ellos más de 15.000 procedentes de fuera de España y que han sido acogidos en hogares por miles de familias valencianas con la colaboración de cerca de 200 parroquias de la diócesis.
En las jornadas, celebradas desde el pasado 28 de diciembre hasta el 1 de enero de 2016, han tomado parte jóvenes europeos, procedentes de más de 50 países, entre ellos, 900 voluntarios, además de los participantes llegados de diferentes ciudades españolas y un centenar de informadores acreditados para cubrir las celebraciones.
Durante el encuentro europeo, la Catedral de Valencia y la iglesia de Santa Catalina de Valencia han acogido todos los días oraciones simultáneas y talleres al igual que dos grandes carpas instaladas por la organización en el cauce del río Turia, desde donde también han sido repartidas 150.000 bolsas de comida para los peregrinos durante los cinco días.
Además, han sido ofrecidos un total de 28 talleres sobre fe, solidaridad y sociedad, arte y cultura, en distintas iglesias, parroquias, colegios y centros, así como en la Seo.
Hermano Alois: «La paz no es solamente una cuestión de negociaciones»
El encuentro europeo de Taizé en Valencia ha contado con la participación del prior de la comunidad ecuménica de Taizé, el hermano Alois, que ha dirigido todos los días meditaciones a los jóvenes y les ha planteado propuestas sobre la Misericordia para la reflexión y la acción durante los próximos años.
El prior de la comunidad ecuménica de Taizé, el hermano Alois, relató su viaje de estas Navidades a Beirut y a Homs, donde, según señaló, «cada uno de los que conocí, me decía `Rece por nosotros´». «Nuestra respuesta» ante la violencia, ante las guerras, «no puede ser teórica, sino que tiene que salir desde nuestra propia vida», ha añadido hoy. En este sentido ha subrayado que «la paz no es solamente una cuestión de negociaciones», sino que «la paz debe empezar en nuestros corazones».
Asimismo, ha expresado su deseo de que este encuentro de Taizé en Valencia sea un «encuentro bueno para la construcción de Europa, que no volvamos a los nacionalismos sino que necesitamos la riqueza de cada región para construir juntos».
El Cardenal Cañizares dio la bienvenida a los jóvenes del encuentro europeo
El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, dio el pasado 29 de diciembre desde la Catedral la bienvenida a los participantes en el encuentro europeo de Taizé y, dirigiéndose por primera vez a ellos, les invitó a centrar el sentido de su peregrinación en Jesucristo. «Sólo Jesucristo es la vida y sólo Jesucristo nos hace libres», señaló.
El Cardenal Cañizares había destacado que es «un encuentro de afirmación de Dios, que es amor, misericordia y nos trae la paz a través de su Hijo» y «es un encuentro fundamentalmente de oración, de afirmación de Dios». Así, «sólo de Dios viene la paz, sólo de Dios viene el amor y sólo de Dios viene la misericordia», ha indicado.
En el encuentro de Valencia «hacemos presentes los excesivos problemas del mundo», como las guerras, la violencia, la destrucción del hombre, en definitiva, y por ello, con la comunidad de Taizé y los jóvenes, «rezamos, porque la oración es el gran arma que tenemos los cristianos, porque es la expresión de nuestra confianza en Dios que es amor, misericordia, que quiere a todos los hombres y trae el perdón y la paz con su Hijo venido en carne».
Presencia de obispos españoles y extranjeros
También, numerosos obispos españoles y de otros países europeos han viajado a Valencia para el encuentro como el presidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo de Valladolid, cardenal Ricardo Blázquez; el arzobispo de Madrid, monseñor Carlos Osoro, el arzobispo de Barcelona, monseñor Juan José Omella o el obispo de Málaga, el valenciano monseñor Jesús Catalá, entre otros. También, entre los prelados europeos acudieron los obispos de la próxima sede del Encuentro, Riga, la capital de Letonia: el arzobispo católico, Zbignevs Stankevics, y el arzobispo de la Iglesia Luterana Evangélica de Letonia, Janis Vanags.