(Protestante Digital/InfoCatólica) Era el 24 de agosto, seis días después de que los hackers expusieran los nombres de millones de personas que se habían registrado en Ashley Madison. Su esposa, Christi, encontró el cuerpo de su esposo.
«Fue uno de esos momentos para los que la vida no te prepara», explicó a CNN. «Tuve que llamar a mis hijos. ¿Cómo les dices a tus hijos que su padre se ha ido y que él se quitó la vida?»
En su nota de suicidio, Gibson hablaba sobre «la depresión». También decía que «sentía muchísimo que su nombre estuviera en la lista de Ashley Madison», dijo Christi. «Lo que sabemos de él es que le dio su vida a otras personas y que a todos los demás les ofreció gracia, misericordia y perdón, pero que, de alguna manera, fueron cosas que no pudo extenderse a sí mismo», expresó la viuda.
Ashley Madison fue hackeado en julio y se dio a conocer la información personal de los usuarios en agosto. Desde entonces, las autoridades de Toronto han dicho que están investigando suicidios que podrían estar relacionados con la descarga de datos. Los hackers también han enviado mensajes de correo electrónico para extorsionar a las personas que estaban en la lista. Gibson dijo que su esposo probablemente estuvo preocupado porque podría haber perdido su trabajo.
Antecedentes de depresión
«No era tan malo como para que nosotros no lo hubiéramos perdonado y así nos lo han dicho muchas personas pero, para John, hubiera supuesto una vergüenza», dijo.
Gibson, de 56 años de edad, era conocido como un gran maestro con una «risa peculiar», pero que había luchado con la depresión y la adicción en el pasado, dijo su familia.
Desde su muerte, su familia ha hecho un pacto para ser más transparentes entre sí respecto a sus luchas.