(Faro de Vigo) La mayoría de estos jóvenes vive en casa de sus padres, estudia y no trabaja y, al ser preguntado por sus creencias religiosas, el 31 % asegura que no cree en Dios, aunque sí en que hay energías que nos influyen; el 29 % considera que no existe Dios en absoluto; un 16 % sí cree que hay Dios, pero no el que presentan las religiones; y el 14 % afirma creer en el Dios de los católicos. Además, la mayoría, un 49 % piensa que no hay vida después de la muerte, frente a un 26 % que sí lo cree y un 25 % que duda.
Así lo concluye el tercer barómetro Cambridge Monitor, publicado por Cambridge University Press (editorial de la universidad inglesa del mismo nombre).
La creencia u opinión sobre religión de estos jóvenes -que en un porcentaje del 84 % asegura que tendrá que abandonar España para encontrar trabajo- también muestra diferencias según la clase social a la que pertenecen.
Entre los de clase alta, el 16 % es católico o cree que hay un Dios diferente al que presentan las religiones, un 29 % no es creyente y un 28 % piensa que hay energías que nos influyen.
Respecto a la clase media, el mayor porcentaje (32 %) no cree, y el menor (13 %) es católico. El 38 % de los jóvenes de clase baja cree en la influencia de energías, frente a un 13 % que es católico y un 24 % que no cree.
Además, hay diferencias entre mujeres y hombres pues, por ejemplo, el 32 % de los hombres cree que no existe Dios, frente a un 27 % de mujeres, mientras que el 34 % de ellas piensa que hay energías que nos influyen, frente al 27 % de ellos.