(Ecclesia) En otro estado indio, en Kerala, al sur del país, un cementerio cristiano en el distrito de Pathanamthitta ha sido objeto de vandalismo, con tumbas y lápidas destruidas durante dos días consecutivos. Incluso el muro del cementerio ha sido pintado con graffitis.
En Mangalore, en el estado de Karnataka, en la India central, una sala de oración católica en las afueras de la ciudad ha sido apedreada hasta romper las ventanas. Según los cristianos locales «algunos elementos antisociales están tratando de crear el pánico y la inseguridad en la sociedad».
Un foro de Ong cristianas, ha dicho que «los ataques y los frecuentes actos de vandalismo contra objetivos cristianos en diferentes partes del país son motivo de preocupación: las autoridades civiles tienen el deber de detener la violencia, garantizar la paz y la armonía en la sociedad, proteger el Estado de Derecho y la libertad religiosa»