(Aleteia/InfoCatólica) En cuanto al presidente de la Unión de Mezquitas de Francia, Mohammed Moussaoui, también quisiera una «reacción» de los musulmanes, cuya religión es «explotada por los delincuentes.»
«Los musulmanes están traumatizados, están cansados, la mayoría silenciosa se ve a sí misma como rehén tomado por los extremistas», dice el rector de la mezquita de Burdeos, mostrando su deseo de «que la comunidad musulmana consiga actuar unida, se manifieste».
«Es necesario que los musulmanes salgan a la calle en masa para expresar su disgusto por la confiscación del Islam por parte de estos extremistas, esos locos», dice Tareq Oubrou.
Además de su cercanía a las familias de las víctimas, Tareq Oubrou considera que este acto es «un golpe para el Islam y los musulmanes de Francia, un acto que va en la dirección de la escisión de la sociedad y retrasar la asimilación y integración de los musulmanes».«¿Quién se beneficia del crimen?», se preguntó el imán de Burdeos antes de asegurar que no beneficia ni al islam ni a los musulmanes.
«La característica de una religión es unir a la gente -insistió-, y cualquier acto dirigido a dividir a la humanidad, la sociedad, no es un acto religioso.» El imán de Burdeos señaló que la «masacre» ocurrida en Charlie Hebdo es «la primera de esta magnitud desde la instalación de la comunidad musulmana de la década de 1980,» en Francia.
Religión instrumentalizada
En cuanto al presidente de la Unión de mezquitas en Francia, Mohammed Moussaoui, dijo que estaba «consternado y conmocionado» tras el atentado mortal en París y señaló que se acaba de orar con Francisco «para que la paz y la hermandad se consoliden y fortalezcan al mundo », con un pensamiento especial para los cristianos de Oriente.
A su vez, aseguró que «no hay suficientes palabras suficientemente fuertes y duras» para expresar la condena de los musulmanes en Francia que se sienten «víctimas dobles», porque «la religión es explotada por los delincuentes» y porque «el intento populista de explotar este tipo de actos agrava aún más las tensiones y temores en la sociedad».
Para el ex presidente del Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM), «si los extremistas insisten en redoblar sus esfuerzos e intensificar sus actos, su violencia y las atrocidades, los musulmanes deben intensificar su reacción a esta barbarie que por desgracia, a veces cometen en nombre del islam ».
Monseñor Michel Dubost, presidente del Consejo para las Relaciones Interreligiosas de la Conferencia Episcopal de Francia, guió a los cuatro imames franceses durante su visita a Roma. Para el obispo de Evry-Corbeil-Essonnes, «la única respuesta» a este tipo de actos incluidos en el «anarquismo» es la «mano tendida».
«Si la única razón de vivir es la violencia, es que hemos perdido todo sentido», explicó el obispo y, precisamente, la visita de los imanes en el Vaticano va en la línea del «acuerdo».