No critican que lo que la Iglesia dice, sino que la Iglesia diga

Mons. Sturla: «Negarle a la Iglesia el derecho a opinar es fascismo»

En su reciente mensaje de Navidad monseñor Sturla, arzobispo de Montevideo, definió la «Guía de la diversidad sexual» que se pretende imponer en las escuelas como «Guía de la uniformidad mental». Entre las reacciones a sus palabras, la directora del Instituto Nacional de las Mujeres del Mides, Beatriz Ramírez, aseguró que el prelado «reitera la permanente intención de injerencia de la Iglesia» y «viola los principios de laicidad del país». Mons. Sturla ha respondido advirtiendo que pretender callar la opinión de la Iglesia es fascismo.

(El Pais/InfoCatólica) Mons. Sturla explicó que la guía, que propone «deconstruir el modelo tradicional de familia», es irreconciliable con la concepción judeocristiana de la sexualidad y que, aunque todas las personas son respetables, no todas las ideologías lo son. Cree que el anticlericalismo es «anacrónico» y que si bien puede haber «algún grupito menor», no nota «una postura anticlerical». El error, observa, es que cuando la Iglesia se expresa, critiquen no lo que dice, sino que lo diga. 

–Usted se ha opuesto a la baja de edad de imputabilidad penal y a la guía de educación y diversidad sexual promovida por el Ministerio de Desarrollo Social (Mides). ¿En qué casos es conveniente que la Iglesia opine sobre cuestiones politizadas?

–Cuando son temas de interés de la ciudadanía y que, de algún modo, tocan especialmente cuestiones que a la Iglesia como tal le preocupan expresamente y que, al mismo tiempo, no son estrictamente político- partidarios; en estos últimos uno trata de no meterse. En asuntos que tocan la vida de las familias, de los jóvenes o lo educativo, y que no son estrictamente político-partidarios parece necesario decir una palabra en defensa de los derechos de las personas y también de los que tenemos una visión humano-cristiana de la vida y los acontecimientos cuando entendemos que hay propuestas que van contra esa visión.

–Contó que le pidió una entrevista a Tabaré Vázquez en la que le expresará su preocupación por la guía de diversidad sexual y le planteará la colaboración de la Iglesia y el Estado en la educación.

–Sí, en realidad quiero saludarlo, felicitarlo y ver las cosas en común que podemos hacer. Sin duda, lo que uno tiene como preocupación más inmediata saldrá en la conversación. Los temas que en este momento más me preocupan y que eventualmente lo hablaría con Vázquez y con otras personas o actores de la sociedad, es el tema educativo y el de la guía de la diversidad sexual.

–Respecto a la «ideología de género» que afirmó, está detrás de ese documento que propone «deconstruir el modelo tradicional de familia». Usted dijo: «Supongamos que sea respetable pero que no me la impongan». ¿Cree que es respetable?

–Lo respetable siempre, y en todo lugar bajo todas circunstancias, son las personas. Merecen el máximo respeto piensen lo que piensen, tengan la orientación que tengan, sean de la ideología que sean y de la clase social que sean. Las personas son todas y siempre respetables. Es más, la Iglesia sostiene la respetabilidad de las personas y su integridad desde la concepción hasta la muerte natural. Otra cosa es que uno tiene unas ideas, otros otras y se combaten. No todas las ideas de por sí merecen todo el respeto del mundo porque hay ideologías racistas, xenófobas, el nazismo era una ideología. Hay que distinguir claramente: una cosa son las personas que sostienen determinadas ideologías y otra cosa es la ideología en sí.

–¿Qué opina en este caso?

–En general no estoy de acuerdo con la ideología de género. Pero en este caso, «se les fue la moto», como me escribió uno, porque la propuesta clara de deconstruir el modelo de familia heterosexual supone ir más allá de la ideología de género. Y promueve un nuevo tipo de sociedad donde los chicos, desde muy pequeños, no sólo admitan la variedad de orientaciones, sino que también la vean como algo variable que puede ir cambiando, que no tiene por qué ser la misma a lo largo de la vida y que «basta con que des rienda suelta a tu parecer y elección».

–¿Lo que se propone en la guía es reconciliable con la concepción judeocristiana de la sexualidad?

–Por supuesto que no. Es clarísimo, por eso la oposición frontal a este modo de presentar la ideología de género. No me quiero meter con toda la ideología de género que es muy compleja, pero sí a la aplicación presentada en esta guía.

–Tras su pedido de no imposición de este documento, al que definió como la «guía de la uniformidad mental», la directora del Instituto Nacional de las Mujeres del Mides que lo promovió, Beatriz Ramírez, dijo que su crítica «reitera la permanente intención de injerencia de la Iglesia» en este caso en la educación y «viola los principios de laicidad del país». ¿Qué opina de esto?

–Me resulta gracioso porque una cosa es que no estemos de acuerdo. Está bien, eso es clarísimo. Otra cosa es que se niegue el derecho a la Iglesia de decir lo que piensa. Eso es fascismo: cómo la Iglesia no va a poder opinar sobre algo que afecta a las personas y a la mayoría de los chicos cristianos. Porque no pensemos que la mayoría de las familias cristianas mandan a sus hijos a la escuela católica. Muchos asisten a la escuela oficial, entonces, ¿van a recibir eso?. No. No estamos de acuerdo. Más que ser un tema de los obispos, tienen que ser los mismos padres los que se opongan a este tipo de guía y que busquen los medios para frenarla, como el Consejo Directivo Central (Codicen) frenó su distribución en un acto de sentido común.

–Usted se acercó a grupos no sólo alejados sino también de algún modo enfrentados a la Iglesia, como el LGBT. ¿Es posible lograr que los fieles no los excluyan si consideran que tener relaciones homosexuales es un pecado?

–La Iglesia no es ni puede ser un «club de perfectos», sino, no estaríamos nosotros. Nadie se puede sentir apartado de la Iglesia porque por definición es universal, para todos: eso quiere decir la palabra «católica». En el evangelio, encontramos con claridad que Jesús dice que viene para los pecadores no para los justos; para los enfermos, no para los sanos. El pecado, sea el que sea, nos aleja de Dios, pero Él viene a nuestros encuentro, nos abre sus brazos. La propuesta cristiana en materia de moral sexual es muy exigente, porque solo admite las relaciones sexuales en el ámbito del matrimonio. Pero si hay cristianos que por diversidad de motivos viven una vida de pareja fuera del sacramento del matrimonio, no pueden sentirse excluidos de la comunidad aunque no puedan recibir la comunión.

–¿De qué modo?

–Hay países, yo lo he visto en Angola, pero también se hace aquí en algunos lugares, donde todas las personas se acercan a recibir a Jesús: los que no pueden comulgar por su situación cruzan los brazos sobre el pecho y piden al sacerdote la bendición, para experimentar así la cercanía del Señor aunque no comulguen.

–¿Cómo recibe que en algunos sectores políticos tengan un discurso anticlerical?

–El anticlericalismo en el Uruguay es algo de hace un siglo. Son cuestiones anacrónicas, puede haber algún grupito menor pero no creo que haya una postura anticlerical. Lo que pasa es que cuando la Iglesia se manifiesta, el error de algunos es, en lugar de criticar lo que la Iglesia dice, critican que la Iglesia diga.

–Se ha dicho que hay «sectores conservadores» de la Iglesia que no están de acuerdo con la «revolución» del papa Francisco. ¿Le consta que así sea?

–Es natural: si un Papa es más «conservador» va a haber gente que va a estar a disgusto y si es más renovador va a haber otro sector que esté a disgusto, pero esto es normal. La Iglesia no es una especie de ejército que sigue todo en orden de batalla, sino que en la Iglesia es muy importante la libertad de las personas. Precisamente, la figura del Papa en toda la Iglesia, del obispo en las iglesias diocesanas, es el centro de unidad en la diversidad. Hay una frase de San Agustín que es muy famosa que dice: «En lo opinable, libertad, en lo esencial unidad, en todo, amor». Ojalá que eso se viva.

Importancia de la iglesia en la política global

Respecto al rol destacado que ha tenido el papa Francisco en el restablecimiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, el arzobispo de Montevideo, Daniel Sturla, dijo que «la Iglesia realiza muchas cosas, sobre todo a nivel del Vaticano, que no son públicas». Y este fue uno de esos casos, «que se mantuvo en secreto hasta que los presidentes (Raúl) Castro y (Barack) Obama lo publicitaron». Además contó que «se sabe, aunque tampoco es tan público», que Juan XXIII intervino cuando la Crisis de los misiles en octubre de 1962. Por otra parte, recordó «la intervención de Juan Pablo II cuando ya era absolutamente inminente la guerra entre Argentina y Chile» en 1978. Y sus intervenciones para detener las dos guerras de Iraq (1991 y 2003), que «fueron un fracaso». Sturla concluyó que la Iglesia realiza «muchas intervenciones, algunas conocidas, otras no tanto y sin duda tiene mucha importancia». En este sentido, destacó su papel en la caída del comunismo en el Este europeo (1989) «donde también el rol de Juan Pablo II, de la Iglesia en general y de la Iglesia polaca en particular, fue muy importante». En cuanto a Juan Pablo II, Sturla explicó que fue «terminante» acerca de la imposibilidad de que las mujeres se ordenen porque «si Jesús en su momento, teniendo discípulos y discípulas, confiere el sacerdocio solo a varones, la Iglesia no tiene la potestad de cambiar lo que hizo Cristo». «Es muy difícil que eso cambie en la vida de la Iglesia católica», concluyó.

«Se perdió sencillez del lenguaje; cuesta que nos entiendan»

La disminución de las personas que practican el culto católico es una de las preocupaciones del arzobispo de Montevideo, Daniel Sturla. «Hay un dato que es muy fuerte y muy duro pero que ha sido público también: es que en 20, 25 años ha disminuido el 50% en forma global la participación en el culto católico». Esto incluye los bautismos, primeras comuniones, casamientos y la asistencia a misa. «Un 50% en 25 años es mucho», enfatizó Sturla. Si bien precisó que esto se da en Montevideo, explicó que cree que «se extiende al interior del país». Y advirtió: «Esto obviamente nos tiene que golpear y que llamar la atención, no podemos no llamar las cosas por su nombre».

Explicó que la situación no es comparable a la de un club que pierde los socios y se funde. «El tema no va por ahí, si yo de verdad creo que conocer a Jesucristo es la alegría más grande del corazón, que pertenecer a la comunidad cristiana es una alegría enorme porque en la comunidad yo encuentro sentido a mi vida, mi vida se llena de gozo y alegría, tengo motivos para vivir, consuelo para el dolor, esperanza para trabajar por un mundo mejor, etcétera, hay una cantidad de gente que lo va perdiendo, eso empobrece a las personas y también al Uruguay».

Sturla ha destacado que el problema central de la Iglesia es su modo de comunicarse. «Muchas veces hablamos un lenguaje que es como para iniciados y no se entiende comúnmente, entonces esto es una complicación, sobre todo en el lenguaje más popular», observó el arzobispo. Explicó que «la Iglesia ha perdido esa sencillez en el lenguaje y cuesta que la gente común entienda lo que anuncia». Esto, señaló, «obviamente» debe ser revisado. El desafío, entiende, es llegar a «toda la gente con un lenguaje cercano» y hacer una comunicación fluida, en la que también haya un feedback, «un ida y vuelta donde no solamente es la Iglesia que enseña, sino también la Iglesia que aprende». En ese sentido, reconoció que los curas deben «aprender mucho». «Grandes maestros son los niños y los jóvenes», dijo.

Respecto a que bajo el título de «religión» existan organizaciones que lucren con la necesidad de la gente, Sturla indicó que «cuando lo religioso se toma para otra cuestión que no es la relación de las personas con Dios, el formar una comunidad de creyentes, y una vivencia religiosa que ayude a liberar a la persona de sus males, de su pecado, hay que abrir los ojos». Y valoró: «cuando hay un aprovechamiento, sobre todo de la gente más frágil o más pobre y más que nada económico, creo que es un pecado contra Dios». Explicó que «el segundo mandamiento del decálogo dice no tomar el nombre de Dios en vano, entonces cuando se lo usa para un aprovechamiento personal económico es un grave pecado, ni que decir cuando se toma el nombre de Dios para la violencia como es lo que el Papa está diciendo con respecto al uso de la violencia por motivos religiosos». Según Sturla, en Uruguay la mayoría de las iglesias se dedican «al servicio de Dios y de la gente». Aunque notó que «hay algún pequeño grupo que quizás está lucrando con el aspecto religioso», advirtió que no le toca a él desenmascararlos.

 

25 comentarios

Ricardo de Argentina
"Nadie se puede sentir apartado de la Iglesia porque por definición es universal, para todos: eso quiere decir la palabra «católica»."
---

¿Y los excomulgados?
Mons. Sturla parecería tener dificultades para distinguir entre la Iglesia y una plaza pública.
Así como él han de pensar muchos en la Jerarquía, pues últimamente sólo se condena a quienes previamente han sido condenados por la Opinión Pública.
31/12/14 11:46 AM
María
Ricardo de Argentina:
No quites el texto del contexto, ni hagas de la excepción la regla. La Iglesia existe también para que se salven los excomulgados.
31/12/14 2:11 PM
Mariano (Argentina)
Muy preocupante su negativa a condenar la ideología de género in totum. Me parece un obispo peligrosísimo, con nula formación filosófica, puro pastoralismo. Un gran error del papa haberle nombrado para Montevideo.
31/12/14 2:23 PM
Tony de New York
50% de feligreses ya no asisten a la iglesia y el arzobispo continua apaciguando a la DICTADURA del RELATIVISMO.
31/12/14 2:27 PM
Manuel Morillo
Llevan en Europa 225 años los sistemas liberales relativistas, las repúblicas y coronas parlamentarias atacando a la Iglesia Llevan 200 años en Hispanoamérica las república liberales y masónicas atacando a la Iglesia, pero impedir que la Iglesia haga su labor es fascismo (fascismo que en los 20 años que estuvo en el poder en un solo país firmó el tratado de Letran que permite la libertad de la Santa Sede tras la invasión de la republica liberal carbonaria italiana)

Parafraseando el Eclesiastes, "el número de obispos necios es infinito"
31/12/14 2:34 PM
Martin Ellingham
¿El Sr. Obispo habla desde la doctrina de la Iglesia o desde el liberal-catolicismo?

Porque la condena al fascismo fue de alcance muy limitado:

31. "...Nos NO entendemos condenar el partido y el régimen como tales. Hemos querido señalar y condenar todo lo que en el programa y acción del partido hemos visto y comprobado ser contrario a la doctrina y a la práctica católica, y, por lo tanto, inconciliable con el nombre y la profesión de católicos. (Pío XII).

Elementos reprobados que luego fueron modificados por el régimen.

Saludos.
31/12/14 3:00 PM
María Isabel
Mariano(ARGENTUNA), es que por eso lo nombró obispo, para no aceptar "ideas", que van en contra de la enseñanza católica, mi modo que hiba a poner a alguien que enseñe a los feligreses cualquier sonsería...¿acaso crees que el Papa lo aprueba?¿entonces, por qué pondría superiores que no lo aprueban?¡PIENSA!!!, que el Papa respete a la persona que comete ese pecado no quiere decir que esté deacuerdo con lo que hace o que diga que es bueno, simplemente prque no lo es.
31/12/14 3:21 PM
Nano
Teniendo en cuanta todo lo que obtuvo la Iglesia del fascismo, la frase tiene gracia.
31/12/14 3:44 PM
voy
Es espantoso, aterrador, el bajón cristiano en Uruguay, y en todo el mundo. Y eso hay que pensarlo muy mucho. Y la culpa no está ni en el Papa, ni en la Doctrina de la Iglesia. Está en cada cristiano de carne y hueso que está aflojando en la vida de su Fe católica. La Fe es una lucha de cuerpo a cuerpo contra el pecado. O lo mato o me mata. No hay término medio. Y el que no entienda así su vida cristiana, será matado por el pecado. Sin remisión.
31/12/14 4:05 PM
Enrique G. B. A.
En Uruguay decir con fundamento que los que promueven la ideología de género, a través de la Guía citada, han reaccionado como fascistas, a la crítica de la Iglesia, es darle en las mataduras a estos censores, que en nombre de la laicidad quieren imponer su pensamiento único.
El obispo ha hablado claramente desde su país, para sus feligreses y para los que no lo son.
Y si, la iglesia católica, es universal, confiando en la misericordia de Dios, los que a ojos del mundo están perdidos, que si el sacrificio de Jesús fue por muchos -no por todos-, juzgar quienes hacen la diferencia no nos corresponde, ni nos está permitido.
31/12/14 4:32 PM
Eduardo Chafer
A mi me parece que este Sr Obispo dice las cosas con claridad .
Que tiene razón en que hemos de aprender a acoger a todas las personas sin dejar de desaprobar las conductas; pero no las desaprobamos porque tengamos razón-que la tenemos- ni siquiera porque sea una conducta errónea respecto de la verdad-que lo es, pero ellos no lo saben ni quieren saberlo.. de momento-sino por su bien, porque les queremos como Cristo nos amó cuando éramos (somos) pecadores. Tenemos que inventar como debemos Evangelizar a todos,con verdad y caridad que son inseparables.Si nuestro anuncio se limita a espetar la verdad, los pecadores no se sentirán acogidos.Si anunciamos a Cristo crucificado por amor nuestro porque somos pecadores todos,nacerán el arrepentimiento y los deseos de purificarse y romper las ataduras del pecado, Y esto no es ninguna cesión o entreguismo contrario de la verdad, sino buscar que perciban a Cristo y le conozcan.
El sistema democrático tiene importantes límites, ya que su criterio definitivo es la mayoría y no la verdad.Pero no existe un depósito de santos vivos al que podamos recurrir para que nos gobiernen.En la medida en que los ciudadanos tengan criterio propio para no ser manipulados e iluminados con la verdad del Evangelio para que den prioridad al bien común y no a los intereses propios la democracia puede ser un sistema profundamente humano y humanizador porque nos corresponsabiliza a todos.Para ello la receta es la misma:Evangelizar
31/12/14 4:34 PM
Ricardo de Argentina
Manuel y Martín, mucho me temo que la acepción de "fascismo" que emplea Mons. Sturla nada tenga que ver con el Fascismo italiano, y sí con la significación que usualmete le atribuye la Real Academia Mediática: un sumidero de todas las perversiones.

Pero, ¿y la verdad histórica?
Bien, gracias.
31/12/14 4:37 PM
Ricardo de Argentina
María, tranquila, que si agrego texto de la entrevista, más a mi favor.

Es el mismo Mons. Sturla quien con su frase "inclusiva": "Nadie se puede sentir apartado de la Iglesia", descarta de plano separar temporariamente al pecador impenitetne en orden a su conversión.
Olvidando que es una práctica que viene desde los inicios de la Iglesia, y que no fue abrogada por el actual C.D.C.

Pareciera que el afán por la corrección política a toda costa se cargase la práctica bimilenaria de la Iglesia.
Cosa que me parece mal. Muy mal.
31/12/14 4:47 PM
María
Mariano de Argentina:
Sin entrar al fondo del asunto, hacer esos juicios en base a unas líneas, cuestionar la formación filosófica de un sacerdote que no conoces, no tomar en cuenta que Jesús tuvo bastante de "puro pastoralismo", cuestionar la decisión papal de nombrarle obispo... Hermano, espero tengas tiempo de reflexionar y tengas un confesionario cerca. Después recién está bueno hablar del fondo del asunto.
31/12/14 4:57 PM
María
Ricardo de Argentina:
"Separar temporalmente al pecador impenitente en orden a su conversión" ¿Me podría aclarar el concepto? ¿Y el alcance? ¿Y qué tiene que ver con la valentía que ha tenido el arzobispo de Montevideo de encarar al poderosísimo lobby que afrontó?

Yo soy pecadora, y no me gustaría que separaran me temporalmente de la Iglesia. Tampoco entiendo cómo me salvaría si tal cosa ocurriera. Jesucristo también murió por los excomulgados, cuyo camino de salvación también pasa por la Iglesia.

La Iglesia es un hospital de campaña dijo el Papa, no un círculo selecto de santurrones.
31/12/14 6:04 PM
Ricardo de Argentina
María, copio y pego de la enciclopedia de ACI PRENSA:
--------------
Excomunión ( latín ex, fuera de, y communio o communicatio, comunión ---exclusión de la comunión), la censura principal y más severa, es una pena medicinal y espiritual que priva al cristiano culpable de toda participación en las bendiciones comunes de la sociedad eclesiástica. Siendo una pena, supone la culpabilidad; y siendo la pena más grave que la Iglesia puede infligir, naturalmente supone una ofensa muy grave. Es también una pena medicinal en lugar de vengativa, pues está destinada no tanto a castigar al culpable, sino a corregirlo y a traerlo de nuevo a la senda de la rectitud. Necesariamente, por lo tanto, contempla el futuro, ya sea para evitar la repetición de determinados actos culpables que tienen graves consecuencias externas, o, más especialmente, para inducir al delincuente a satisfacer las obligaciones contraídas por su ofensa. Su objeto y su efecto es la pérdida de la comunión, es decir, los beneficios espirituales compartidos por todos los miembros de la sociedad cristiana; por lo tanto puede afectar sólo a los que por el bautismo han sido admitidos en la sociedad.
31/12/14 8:40 PM
María
Ricardo de Argentina, a ver si entendí bien.
¿Usted pretende que el arzobispo hable de excomunión y no de unión? Mi duda no es la definición de excomunión, sino como le dije, qué tiene que ver excomunión con los dichos del arzobispo.

Y no se siga metiendo con mi arzobispo. Métase con la Iglesia de su patria, rómpase trabajando por y para ella, que bastante problemas tiene. No olvido que católico es universal, me molesta que se hable de la Iglesia como de una plaza pública. Algo que hizo usted, y no el arzobispo.

Ah, por cierto, la Iglesia también es para los excomulgados.Es por medio de ella que van a levantar su excomunión y volver al estado de gracia.
31/12/14 10:50 PM
Manuel Morillo
"el número de obispos necios es infinito"

www.facebook.com/AnotacionesRenL/photos/a.442413852523452.1073741827.325080777590094/693596114071890/?type=1
1/01/15 3:39 AM
Ricardo de Argentina
María:
¡Feliz Año Nuevo!
Que Dios te bendiga e ilumine a tu arzobispo.
1/01/15 6:27 AM
Fran
bueno señores, si a la iglesia se le niega su derecho a opinar pues se va a las catacumbas y desde ahi sigue opinando!!
1/01/15 7:26 AM
SIMON- D.U.E. (JUBILADO)
La Iglesia, tiene derecho a levantar su voz Profética, que le ha sido conferida, por Jesucristo, a través del mandato Petrino, los Presbítero, y los Obispos, no pueden de ningún modo, asemejarse a los perros mudos, que no ladran, cuando viene el lobo, tienen que levantar su voz Profética, contra las leyes injustas, puestas por los Legisladores, sin conciencia, y contra los Estados totalitarios, y amorales, por eso son perseguidos muchos Sacerdotes, porque se ponen del lado de la Justicia, en servicio hacia su Señor Jesucristo. Algunos pretenden, amedrentar a los Obispos, y Presbíteros, para que no les impidan legislar Leyes impías, que van contra la Sana Doctrina, y contra las Leyes que proceden de Dios, porque ellos, los Legisladores inicuos, no tienen el Santo Temor de Dios, ni lo conocen. por eso atacan a los que se ponen de parte de la Justicia, por el Reino de los Cielos, y en fidelidad a su Señor, Jesucristo, que es el verdadero Legislador, Santificador, y vivificador, que es Sacerdote, Profeta y Rey, a Él, la Gloria por los siglos de los siglos ¡AMÉN!
1/01/15 2:04 PM
hornero (Argentina)
"Eso es fascismo"; no, eso es marxismo-masónico (uruguayo) promovido por el Nuevo Orden Mundial. Monseñor: no tergiverse la realidad, no oculte el marxismo de ese gobierno. Sus afirmaciones delatan sus contradicciones y ambigüedades. Lamento que usted se sume a los Pastores que confunden.
1/01/15 2:06 PM
hornero (Argentina)
Hoy es la Fiesta de Santa María, Madre de Dios. Invoco a nuestra Santísima Madre para que la Iglesia acepte ser conducida por Ella, iluminada por la Madre de la Sabiduría, protegida por la Madre y Reina de la Iglesia, que reconozca a María como la Mediadora ante Cristo en favor de la Iglesia y de todos los hombres. La parálisis y crisis que sofoca a la Iglesia no se va a resolver sin la intervención poderosa de María. Si no se la acepta, si no se comprende el lugar eminente que Dios ha confiado a Su Madre, si se la elude como prescindible, si se la honra pero no se la invoca, si se la hace callar, si se la margina de los documentos, homilías y diálogo interreligioso, los errores prosperarán al abrigo del desamparo de la gracia de Dios. Dios no ayuda a quienes rechazan la Misión insustituible de María en la Iglesia. Es necesario que nuestros Pastores caminen de la mano de María, tras de María, a fin de que Ella los guíe y conceda a la Iglesia y a la humanidad el don de la Paz, que sólo existe donde la Reina de la Paz es aceptada.
1/01/15 3:21 PM
Manuel Ribadavia
Al parecer en España le llaman fascismo a todo lo malo e indeseable. Existe un confusión conceptual. Pienso que deberían consultar un diccionario de ciencias políticas para expresarse con más precisión.
1/01/15 5:56 PM
Sarto
Negarle a la Iglesia el derecho a opinar, monseñor, es lo propio de la izquierda, lo que ha hecho siempre la izquierda cuando no se ha dedicado a exterminar cristianos como en la España de los años treinta. Con el fascismo, si no me falla la memoria, se creó el Estado Vaticano que le ha otorgado a la Iglesia soberanía e independencia. Así que a la hora de usar términos despectivos sea más preciso. A lo mejor se equivocó o quizá tuvo miedo. La ley del solencio la impone la izquierda.
1/01/15 8:35 PM

Dejar un comentario



Los comentarios están limitados a 1.500 caracteres. Faltan caracteres.

No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.

Los comentarios aparecerán tras una validación manual previa, lo que puede demorar su aparición.