(VIS/InfoCatólica) El Santo Padre presidió el Consejo el martes 18 y esta presencia subrayó la importancia que concede al Sínodo como expresión de la colegialidad episcopal y a la familia, tema de las dos Asambleas, la extraordinaria, ya celebrada y la ordinaria en preparación.
Además del Secretario General, el cardenal Lorenzo Baldisseri y el subsecretario, el arzobispo Fabio Fabene, participaron en la reunión los cardenales Christoph Schönborn, Wilfried F. Napier, Peter Appiah Turkson, George Pell, Donald W. Wuerl, Luis A. Tagle, y los arzobispos Bruno Forte y Salvatore Fisichella. También participó como invitado el obispo Vincenzo Paglia, presidente del Consejo Pontificio para la Familia.
En su introducción a los trabajos, el Secretario General destacó el clima de libertad, sinceridad y el espíritu de comunión fraterna que caracterizaron la Asamblea sinodal para que todos pudieran contribuir a la reflexión. Además, el documento final, la Relatio Synodi refleja fielmente con sus matices, los resultados de los trabajos sinodales, y se presenta como una buena síntesis del proceso llevado a cabo durante el sínodo.
En la reunión se habló de que el período que se abre ahora entre las dos Asambleas, -que no tiene precedentes en la historia de la institución del Sínodo- es muy importante. Es necesario considerar el camino ya recorrido como punto de partida y aprovechar esta oportunidad especial para profundizar los temas y promover el debate en las Conferencias Episcopales, encontrando los recursos y herramientas necesarias para involucrar ulteriormente a las diversas instancias eclesiales en la reflexión sinodal sobre la familia. También se apuntaron algunas ideas sobre la comunicación que pueden ser útiles para la preparación de la próxima Asamblea Ordinaria.
La mayor parte del trabajo se dedicó a la preparación de los Lineamenta para la próxima Asamblea Ordinaria que estarán compuestos, como se anunció previamente, de la Relatio Synodi, acompañada por una serie de puntos que contribuyan a su recepción y su profundización.
Se prevé que los Lineamenta se envíen a las conferencias episcopales a principios del próximo mes de diciembre, para que las respuestas lleguen con tiempo suficiente para ser elaboradas en el Instrumentum Laboris antes del verano de 2015.