(Fides/InfoCatólica) El primer episodio, según la información recibida por la Agencia Fides, se produjo en la parroquia de Saint-Desiré. Después de leer el mensaje, el párroco fue insultado y amenazado por algunos jóvenes que asistían a la Misa. El sacerdote consiguió ponerse a salvo gracias a la intervención de un policía que lo protegió, evitando que sufriese violencia física.
Posteriormente, en la parroquia de Sainte-Thérése de Nganga, el párroco de la parroquia, después de la Misa durante la cual leyó el mensaje de los obispos, fue amenazado por un grupo de jóvenes. El mismo domingo algunos chicos atacaron el convento de las Hermanas Franciscanas. Una religiosa resultó herida por el cristal de una ventana rota por los agresores.
Estos episodios graves se producen después del intento de un grupo que se ha autodenominado «jóvenes católicos» de presentarse en la Nunciatura de Kinshasa con una petición de protesta al Papa Francisco por la supuesta «injerencia de los obispos congoleños en la política nacional». Los obispos han negado que estos chicos pertenezcan a organizaciones de la Iglesia