(Hoy/InfoCatólica) A falta de confirmar cuántos han sido los partícipes del robo, se da por hecho que saltaron las vallas de acceso a la iglesia y procedieron a destrozar una de las vidrieras de las paredes del templo para utilizarla como vía de acceso al interior.
Una vez dentro, manpularon tres de los cuatro cajetines de la recaudación de los lampararios para sustraer el dinero y, además, han forzado la puerta de la sacristía permitiendo así la entrada a la dependencia y sustrayendo un ordenador portátil y un radio cassette.
Hasta el momento no han podido cuantificar qué más cosas han desaparecido.