Pide que se les reclame que devuelvan el dinero

Mons. Blázquez pide un escarmiento ejemplar y rápido para los políticos corruptos

El nuevo presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Mons. Ricardo Blázquez, ha cargado este jueves contra la corrupción política en España y ha abogado por una solución judicial «justa y pronta» para los defraudadores que sirva de «escarmiento y ejemplaridad» para el resto de la sociedad. En declaraciones a 13tv recogidas por Europa Press, el arzobispo de Valladolid ha calificado de «terrible» y «muy penoso» el fenómeno de corrupción que se vive en España y ha dicho comprender que haya muchas personas «profundamente enojadas» por ello.

(EP/InfoCatólica) Mons. Blázquez ha abogado por una «normativa judicial» que se debe ejercitar «castigando» a los que han sido defraudadores.

«Es bueno que la sociedad encuentre una solución justa y pronta, no de años y años sino suficientemente pronta también para el escarmiento y la ejemplaridad. Y también para que lo defraudado pueda entrar de nuevo en la circulación de la sociedad en su conjunto», ha explicado al respecto monseñor Blázquez.

Inmigración ordenada

Respecto a las llegadas de inmigrantes a Ceuta y Melilla, el arzobispo ha señalado que la inmigración es una cuestión que afecta al conjunto de la Unión Europea y que debe ser tratada con respeto, comprensión, humanidad y con una distribución de los recursos. «Las fronteras que tenemos no solo son fronteras de España sino de la Unidad Europea», ha defendido.

En este sentido, ha defendido una inmigración «ordenada» –«si es anárquica, terminanos perdiendo todos», ha recalcado– y ha apostado por favorecer «fuentes de creación de riqueza en los países de los que proceden estos inmigrantes» y distribuir los recursos destinados a este fin.

«Tampoco seamos como los defensores de un castillo perfectamente enriquecido y desde ahí asaeteamos a alguien. La humanidad es una familia y Dios ha creado el mundo para la familia entera», ha subrayado Blázquez, que ha recordado que España es un pueblo de emigrantes y debería «tener la experiencia de comprender» el sufrimiento de estas personas.

Más pactos de Estado

El recién elegido presidente de la CEE ha encuadrado la corrupción y la inmigración entre las «grandes cuestiones de Estado» y ha admitido que, aunque el Gobierno es el que debe llevar la «batuta» en estas cuestiones, le gustaría ver «que hay más causas de Estado en las que todos confluimos».

Entre esos grandes temas de Estado en los que se debería llegar a consensos ha citado, además, la situación económica y el desempleo juvenil, algo que no es «una cuestión partidista». «¿Cómo no vamos a estar todos concernidos por el paro tan abundante entre los jóvenes?», se ha preguntado Blázquez, que ha pedido «unir todas las manos y todos los esfuerzos» para luchar contra este fenómeno.

Finalmente, el arzobispo de Valladolid ha hecho un llamamiento para practicar la «bonhomía» frente a la crisis, es decir, «cultivar la bondad que hay en el corazón». «Es verdad que la crisis es muy dura y muy duradera, aunque va habiendo signos de recuperación. Pero si han aumentado las dificultades, ha aumentado también la colaboración económica y el voluntariado. Esto significa que hay bonhomía», ha resumido.

 

InfoCatólica cuenta con tu ayuda, haz clic aquí

Solo contamos con tu ayuda. InfoCatólica seguirá existiendo mientras sus lectores quieran.

Haz tu donativo

Por bizum (solo para España)

Qué es bizum

Por PayPal, selecciona la cantidad:

Si prefieres otras modalidades para poder donar (ingreso, transferencia, ...), haz clic aquí.

9 comentarios

Tomás Bertrán
El que roba, lo debe toda su vida. Y se puede robar de muchas formas. El dinero ajeno, la fama del prójimo, la posible riqueza de los países del sur al no querer repartir el pastel ya que así a los países del norte nos tocará mayor parte, la esposa de otro, el respeto debido a Dios y a todo lo sagrado, etc., etc.
El que roba, lo debe toda su vida. Y si no se quiere devolver lo robado, los católicos sabemos, y así es para todos ya que es Ley natural, no se puede obtener la absolución, el perdón. Por lo que robar es de lo más tonto que puede haber.
Y parodiando a Alberto Cortez, canto:
"Pobrecito el ladrón,
cree que el pobre soy yo".
14/03/14 9:26 AM
Luis I. Amorós
Las primeras declaraciones de monseñor Blázquez hablan sobre temas candentes de actualidad: corrupción política e inmigración.

Es importante que los prelados (y sobre todo el presidente) hable de estos temas desde una perspectiva cristiana, para que se vea que la fe impregna todas las facetas de la vida pública, no sólo bioética, familia y educación (con ser muy importantes estas). No entiendo porqué los obispos no han salido mucho antes a hablar con claridad de que la corrupción, que no es sino una modalidad de robo, es un pecado muy grave. Es algo perfectamente acorde con el magisterio de la Iglesia, y sirve para que mucha gente que sufre los efectos de la crisis y apenas conoce a la Iglesia por los medios de comunicación se sienta acompañada por la comunidad católica.

A mi juicio, ha hablado bien sobre ambos temas: que los ladrones cumplan con la sociedad y devuelvan lo robado (además del castigo), y que la regulación de la inmigración sea caritativa pero ordenada.

Eso sí, no pueden evitar meterse en temas que nada tiene que ver con su ministerio con tal de quedar políticamente correctos y jugar a populismo: ¿por qué tiene que opinar sobre la UE? ¿y qué quiere decir "que lo defraudado entre de nuevo en la circulación"? Con lo fácil que es hablar de Bien Común y Justicia...

pero bueno, en conjunto, bastante bien.
14/03/14 10:10 AM
Mariano
He conocido la corrupción económica en política a través de la prensa, que ha sido escandalosa. Pero en el ámbito del trabajo no han sido menores los casos que he conocido... y siguen campando a sus anchas. Un ejemplo, un profesor que alcanzó su título fraudulentamente, de otro profesor que consiguió su puesto fraudulentamente, y que al cabo de unos pocos años reciben subvenciones de mucho más de 500.000 euros para proyectos de investigación sin haber obtenido méritos de investigación como otros candidatos tienen pero a los que no se les da opción ninguna según la ley porque no son funcionarios o contratados del estado. El estado se ha convertido en una cueva de ladrones, falsificadores, y negligentes profesionales debido a estas formas de hacer.
14/03/14 11:38 AM
carlos
Hay que hablar de la Evangelium Vitae, citando sus textos, la Veritates Splendor, citando sus textos, el Compendio Social, diciendo "del Compendio Social", del Catecismo Universal Citando sus textos, y de todo documento Magisterial, Es EL SEÑOR, citando sus textos.
Así nuestras opiniones, claramente no son propias, son las del Señor.
Hay Mucho del Señor en esos textos, siempre que he dado una charla, y/o o expresado una opinión en público, me los lleve, para que me puedan inclusive corregir, como claramente se lo pido al Estimado Padre Iraburu, y/o a mi Director Espiritual, he ido con los documentos, no por falsa humildad, sino para ser FIEL al SEÑOR, y no me confundan.
A Cristo por Maria y con el Papa.
14/03/14 12:50 PM
Poulenc
Por cierto, ayer el portavoz mediático de la derecha pagana en Valencia, presentaba la elección de monseñor Osoro para la vicpresidencia de la CEE con si hubiera ganado las eleecciones a la presiencia de los EEUU, después de haberse pasado ese medio ocho años ridiculizando a Benedicto XVI. Los obispos Blazquez y Osoro podrían leer el artículo de Daniel Iglesias sobre los principios no negociables de los que habla SS. Benedicto XVI. Todos se sienten interpelados si les hablas de bioética, educación y familia, y se trata de cuestiones en las que sí se ha perdido la conciencia de pecado, por eso hay que produndizar en ello. Nadie se siente interpelado si les hablas de "corrupción" de los políticos ni tan siquiera, los mismos políticos corruptos entusiasmados con la "primavera" eclesial. Monseñor Rouco nunca hubiera hecho ese tipo de valoraciones que no son de carácter prepolítico.
14/03/14 1:05 PM
M.
Los casos de corrupción no se darían tanto si no hubiera encubrimiento por parte de otros políticos, funcionarios, etc. que muchos de ellos conocen estos hechos pero callan a la espera de recibir su parte. ¡Repugnante!
14/03/14 4:41 PM
posodo
Pues a mí, eso de poner el acento en que los castigos tengan que ser "ejemplares" me hace temer que acaben no siendo justos.
Los procesos durarán lo que sea necesario para asegurar esa justicia; otra cosa es que se demoren por falta de medios.
14/03/14 6:42 PM
Alf_3
Es vergonzoso que no solo en España haya tanta corrupción, sino que es mundial. Es la moda de los políticos actuales. Y no solo corrupción por lo que se roban, incluye corrupción en toda la ética de los políticos que tienen múltiples amantes, al cabo las agasajan con dinero del pueblo. Y se cubren unos a otros, esperando ascender y lograr mayores niveles de corrupción. Se van heredando los puestos en quien esperan discreción.
¡Qué asco se ha vuelto la praxis política actual!
¿Cómo nos los quitaremos de encima?
14/03/14 9:21 PM
pedro de madrid
Lamento decirlo. monseñor, no logrará que esto se erradique, no tienen ninguna base religiosa para saber que lo que hacen es pecado. Si sus familiares solicitan funeral, que se lo celebre un sacerdote y en una humilde iglesia, Dios es clemente. Existen católicos piadosos y humildes que merecen que el funeral lo oficie un monseñor
15/03/14 11:17 AM

Dejar un comentario



Los comentarios están limitados a 1.500 caracteres. Faltan caracteres.

No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.

Los comentarios aparecerán tras una validación manual previa, lo que puede demorar su aparición.