(Milenio/InfoCatólica) En entrevista concedida a medios tras oficiar la Santa Miisa en catedral, el arzobispo de Puebla abordó el tema de la reaprehensión de «El Chapo», acción que calificó como un hecho significativo.
«Es un paso contra la violencia y contra las actividades ilícitas. Yo creo que todos los ciudadanos queremos tranquilidad y seguridad. Tenemos derecho a la seguridad y a la tranquilidad que son indispensables para el desarrollo personal como de la familia. Sin duda, será un hecho significativo en este proceso que nuestras autoridades están siguiendo de combate a la violencia y a las actividades ilícitas», apuntó.
Tras la captura del narcotraficante más buscado del mundo en un hotel de Mazatlán, el arzobispo pidió reforzar el trabajo para evitar el llamado «efecto cucaracha».
«Hay esa preocupación, yo lo he expresado, pertenezco al Consejo Ciudadano de Seguridad Pública del estado de Puebla y lo he expresado a las autoridades, que no se den estos hechos y evitar el efecto cucaracha. Yo lo he hecho público, que nuestras autoridades sigan atentas para que Puebla esté en paz y segura», destacó.
¿Qué es el efecto cucaracha?
El “efecto cucaracha” consiste en que al eliminar las oportunidades para la comisión de un delito o al realizar una eficaz prevención de dicho delito, modificando las condiciones en que se comete, los delincuentes cambian de estrategia y el delito se comete de todas formas en otro lado.
Existen cinco formas sugeridas por esta teoria, en las que el delito puede desplazarse:
- El delito puede moverse de una localidad a otra (desplazamiento geográfico)
- El delito puede moverse de un tiempo a otro (desplazamiento temporal)
- El delito puede moverse de un objetivo a otro (desplazamiento de objetivo)
- El método para cometer el delito puede ser cambiado por otro (desplazamiento táctico)
- El delito puede ser sustituido por otro (desplazamiento de tipo de delito)