(Agencias/InfoCatólica) O'Keeffe mantenía, en contra de la opinión de las diferentes instancias judiciales irlandesas, que el Estado no hizo lo suficiente para proteger a los alumnos de estos colegios.
Once de los 17 jueces de Estrasburgo que dictaron sentencia le dieron la razón y consideraron que Irlanda «no cumplió su obligación de proteger a O'Keeffe contra los abusos sexuales», por lo que condenaron al Estado a pagar 30.000 euros de multa en concepto de daño moral y material y otros 85.000 por los gastos derivados del proceso.
La Corte sentenció que «la protección de los niños contra los malos tratos constituye una obligación inherente al Estado» y que O'Keeffe no tuvo la oportunidad de que se reconociera esa responsabilidad en las jurisdicciones nacionales.
Los tribunales irlandeses no consideraron responsable al Estado
En sus diferentes veredictos, los tribunales irlandeses habían considerado que, pese a que el Estado pagaba a la iglesia por los colegios donde estudiaban la mayoría de los niños en aquel momento, no cometió ninguna negligencia.Se escudaban en la tradición educativa del país, que data del siglo XIX.
El director de la escuela que abusó de O'Keeffe también fue denunciado por otros alumnos y está condenado en su país por 386 abusos cometidos contra 21 estudiantes.
Estrasburgo señaló que el Estado había recibido denuncias desde los años 70 sobre el comportamiento de este director y que, pese a ello, siguió confiando la enseñanza a esta institución «sin ningún mecanismo efectivo de control» por parte de las autoridades.