(Fides) Estas personas se enfrentan a la elección dramática de permanecer en los campamentos de refugiados sin ninguna asistencia, o regresar a las montañas Nuba, en Kordofán del Sur en el Estado de Sudán, ya devastado por los combates entre el ejército de Khartoum y los rebeldes del SPLM-N (Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán-Norte).
También la población de Sudán del Sur está sufriendo a causa de la crisis política y militar en el país. Una de las situaciones más dramáticas se registra en Awerial, en el Estado de los Lagos (en el centro de Sudán del Sur), donde más de 70.000 personas desplazadas, la mayoría de ellos mujeres y niños, se ven privados de toda asistencia. Los desplazados son de Bor, capital del estado de Jonglei, en el centro de los combates entre las tropas de Kiir y Machar. Según las estimaciones de las organizaciones humanitarias, las tres semanas de enfrentamientos entre las facciones rivales han obligado a más de 200.000 civiles a huir.
Hoy, 3 de enero se abren en Addis Abeba (Etiopía) las conversaciones entre representantes de Kiir y Machar para poner fin a la violencia.