(LC/InfoCatólica) Las palabras del Cardenal en la homilía se han centrado en el misterio del sacerdocio católico: «Con el sacerdocio, alcanzan una meta; culminan la respuesta a la vocación por la cual se han esforzado durante el largo camino de preparación. Es el logro de un ideal. Pero el sacerdocio es mucho más alto que cualquier ideal humano. No es una elección que nace en el hombre; es una respuesta a un llamado que viene de Dios mismo».
El Delegado ha recordado también que la vida del sacerdote no está exenta de dificultades y retos, pero que la confianza brota de saber que Cristo no abandona a quienes él envía. «Quien ha sido llamado contempla sereno el futuro y su misión. En la amistad con el Señor Jesús, él encuentra al amigo fiel que lo confirma y lo sostiene… que hace seguro su paso y su corazón firme y decidido».
También hizo referencia al proceso de revisión y purificación de la Legión de Cristo en el que los nuevos sacerdotes han participado en primera persona. «Os habéis preparado y habéis sido bien formados… Los últimos años de preparación al sacerdocio han coincidido con los años en los cuales la Legión ha sido llamada a recorrer, bajo la guía de la Iglesia, un camino de la Iglesia, un camino de renovación y purificación, en vista del Capítulo Extraordinario que ha sido convocado e iniciará… el 8 de enero próximo». El Delegado Pontificio hizo un balance de la situación de la Congregación en los últimos años, afirmando que sus palabras refieren algo limitado, y que será el Capítulo quien tome posición ante los hechos vividos por la Legión.
«En la Legión de Cristo hubo un momento en el cual el pecado… se hizo muy visible… hasta alcanzar una publicidad que llenó por largo tiempo los periódicos y medios de comunicación mundiales. Se temía por su misma supervivencia… Cualquier cosa negativa que se contara sobre los Legionarios se consideraba una verdad indiscutible… Para los Legionarios fue un momento feo y difícil. Puso a dura prueba su fidelidad a la vocación».
Se dirigió también a los nuevos sacerdotes diciendo: «[La mayoría] se quedaron porque pensaron que su opción fue por Cristo, quien no les había traicionado y no podía traicionarles. Se confiaron al Dios de la bondad y de la misericordia, capaz de renovar el corazón de los hombres y de sacar hijos de Abraham de las piedras… Vosotros que os quedasteis no sois ciertamente responsables personalmente de los hechos dolorosos revividos en este camino de más de tres años… Habéis permitido el camino de la purificación… Habéis así confirmado con vuestro comportamiento la verdad de que el mundo se renueva no por quien se limita o se pierde en los escándalos o en la desconfianza, o se pone en la ventana a curiosear o a expresar la propia insatisfacción, sino de quien asume el pecado, llevando las consecuencias al ofrecimiento de su propia vida y permaneciendo fiel a la propia vocación. Son estos los Legionarios de los cuales la Iglesia y la Legión tienen necesidad».
El Cardenal De Paolis recordó que estos tres años han sido de penitencia y de examen de conciencia de toda la Congregación, en la que se han escuchado las acusaciones, se han examinado, se ha reconocido lo que debía reconocerse, y ahora hay un esfuerzo notable por corregirlo. «Deseo que de ello nazca una nueva Legión reconciliada consigo misma y con los demás, capaz de perdonar y de pedir perdón», afirmó el Cardenal. «Estos hechos han marcado en modo positivo vuestro sacerdocio. El Sumo y Eterno Sacerdote, vino para revelarnos el rostro misericordioso del Padre, a perdonarnos y adoptarnos como hijos. Que éste sea también el rostro de vuestro sacerdocio».
Nacionalidades de los nuevos sacerdotes
Los 31 nuevos sacerdotes de la Legión de Cristo provienen de diez países: México (12), Estados Unidos (8), Brasil (3), Argentina (2), Alemania (1), Italia (1), Francia (1), Canadá (1), Colombia (1) y Chile (1).
De los 31 nuevos sacerdotes, 16 iniciaron su discernimiento vocacional y formación en los centros vocacionales (seminarios menores) de la Legión de Cristo. El resto ingresó directamente en el noviciado después de haber concluido el bachillerato, durante el período universitario o después de haber tenido alguna experiencia laboral.
Con olor a oveja
Los testimonios y la historia vocacional de los nuevos sacerdotes se recogieron en el libro «Con olor a oveja» y se pueden consultar en línea en www.ordenaciones.legionariosdecristo.org
Entre los nuevos sacerdotes se encuentran el P. José Rubén Valencia, L.C (Ciudad de México), quien se graduó con honores como ingeniero en tecnologías de la información y telecomunicaciones por la Universidad Anáhuac México Norte; el P. Alberto Carrara, L.C (Padua, Italia) quien cursó la carrera de Biotecnología médica y defendió su tesis experimental sobre la oncogénesis viral humana (recibió el título de Doctor con 110/110 cum laude).
