(ACI/Fides) En declaraciones al diario iraquí Az-Zaman, el obispo greco ortodoxo dijo que «cada cristiano joven en posición de hacerlo debe tomar las armas para proteger a Siria, las iglesias y conventos», porque ante lo que está pasando con el pueblo sirio, «no podemos permanecer con los brazos cruzados».
Tales declaraciones fueron criticadas por Mons. Hindo, pues «como hombres de la Iglesia, no podemos incitar a los cristianos a tomar las armas para participar en el conflicto. No podemos decir estas cosas, es una locura. Va en contra del Evangelio y de la doctrina cristiana».
Según informó la agencia Fides, el Arzobispo siro católico dijo que «en la situación en la que nos encontramos, cada individuo, también cristiano, es libre de tomar sus propias decisiones de acuerdo con su conciencia. Pero la Iglesia, como tal, no puede indicar a nadie el camino de las armas y la violencia, porque se contradice con las enseñanzas del Evangelio».
El gobierno ofreció armas a los cristianos
«A mí, ya el año pasado el gobierno me había ofrecido 700 ‘Kalashnikovs’ para ser distribuidos entre los cristianos de Hassaké y mil para los de Qamishli, y me negué. Estamos en contra de la violencia, independientemente de donde venga», expresó.
Señaló que la trágica situación en Siria y los ataques que sufren los cristianos pueden llevar a una reacción desequilibrada.
«Todos estamos bajo presión, ahora también nos encontramos en angustia por las Hermanas de Maalula, que fueron secuestradas. Pero como pastores debemos consolar a nuestra gente y reconocer que algunos puntos firmes se deben mantener siempre, sea cual sea la situación en la que nos encontramos», reafirmó el Prelado, al advertir que «con declaraciones imprudentes corremos el peligro de hacer que los cristianos se conviertan en objetivo de la violencia».