(Fides) «No estoy al tanto de casos concretos y probados. Además la prensa nigeriana ha dedicado poco espacio a noticias de esta naturaleza, obviamente, porque hasta ahora, no ha encontrado pruebas sólidas de ello», dice el cardenal.
«Que hay secuestros lo sabemos, pero no tengo conocimiento de que exista una campaña sistemática para secuestrar a las mujeres cristianas con el fin de convertirlas y obligarlas a casarse con miembros de Boko Haram. Esto no significa que no haya violaciones de guerra. Son cosas que están ocurriendo lamentablemente en las zonas de conflicto», continua el purpurado, que añade: «Siento decirlo, pero hay personas que difunden rumores que no se pueden controlar para acentuar la sensación de persecución de los cristianos que viven en zonas de más riesgo en Nigeria. No creo que esto nos ayude. Siempre es mejor decir la verdad».
Boko Haram debilitado
Según el cardenal, por último, Boko Haram «ha sufrido golpes muy duros» infligidos por el ejército nigeriano que en mayo lanzó una gran ofensiva en tres estados del norte de la Federación. «Boko Haram no lo que era hace tan sólo 7 meses. Esto no significa que haya sido destruido, pero ahora nos enfrentamos más bien a un conjunto de grupos de bandidos dedicados al robo más que a una organización de guerrilla estructurada», concluye el Cardenal.