(El País/InfoCatólica) La nueva ley permitirá que enfermeras, comadronas y asistentes de los médicos puedan matar a los no nacidos sin que necesariamente tenga que estar presente un médico.
Congresista demócrata presume de que se pueda matar más y mejor
Justo cuando gran parte de los estados del país norteamericano están aprobando leyes que intentan restringier el aborto, California hace lo contrario. «Nos estamos moviendo en diferente dirección y estamos muy orgullosos de ello», ha dicho Toni Atkins, la congresista demócrata por San Diego que presentó la propuesta que finalmente ha salido adelante. «California tiene a sus espaldas una historia muy sólida de apoyo al cuidado de la salud reproductiva de las mujeres», ha señalado.
Atkins presentó esta medida principalmente para que las mujeres que viven en el medio rural tengan acceso a contar con profesionales que puedan practicar abortos, algo no muy sencillo hasta que la nueva ley entre en vigor a principios del año que viene. «Es una cuestión de accesibilidad. California es un Estado muy extenso y más de la mitad de los condados no cuentan con un doctor acreditado», comenta.
Grupos provida advierten que se pondrá en riesgo a las mujeres
De distinta manera opinan los contrarios al aborto, para quienes esta nueva ley pone en peligro la salud de las mujeres. «Esta medida trivializa el aborto», dice Brian Johnston, responsable regional del Nacional Right to Life’s Western. «Va a expandir el número de abortos y a poner en riesgo la seguridad de las mujeres. Los que dicen que se preocupan de la salud de las mujeres, en realidad están haciendo lo contrario, reducir los estándares médicos requeridos».
Para la directora de la Coalition for Woman and Children, Wynette Sills, «Brown ha puesto los beneficios de la industria del aborto por encima de la salud y el bienestar de las mujeres y los niños».