(Efe) La reunión duró unos 50 minutos y se desarrolló, según Scioli, en un ambiente de cordialidad y cercanía, y durante la misma el papa argentino destacó que Iberoamérica ha trabajado y avanzado «mucho» para evitar las consecuencias del «capitalismo salvaje» y las «injusticias sociales».
Francisco también hizo referencia a su viaje el próximo 8 de julio a la isla de Lampedusa, la más meridional de Italia, para reunirse con los indocumentados que llegan allí con el objetivo de entrar en Europa, y contó que la idea de viajar a la conocida como «Puerta de Europa» de los inmigrantes le surgió mientras rezaba.
«El papa me dijo que quiere estar en Lampedusa para acompañar y abrazar a los inmigrantes», declaró el gobernador de Buenos Aires, quien destacó que para Francisco esta visita es una «prioridad».
Scioli relató que vio a Francisco «grandioso, sereno, nada cansado, con voluntad y vocación de servicio y de influir positivamente en este contexto mundial», y agregó que no presenció ninguna diferencia entre el Bergoglio cardenal de Buenos Aires y el actual pontífice.
En este sentido, el gobernador relató como anécdota que al preguntar dónde se debían de sentar él y su esposa, el papa respondió: «Yo me siento en cualquier lado, siéntense donde quieran».
Sobre una posible visita del Santo Padre a Argentina, el papa trasladó a Scioli que «no la tiene prevista».
Con motivo de la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar en Río de Janeiro (Brasil) del 22 al 28 de julio, el pontífice y Scioli también departieron sobre la importancia de los jóvenes, del deporte, de la educación y el acceso al trabajo.
No hablaron, en cambio, de la situación política de Argentina, ni de las protestas en Brasil y Egipto, según explicó el gobernador bonaerense.
Como ha venido expresando desde el primer día cuando salió al balcón de la basílica de San Pedro convertido ya en papa, el pasado 13 de marzo, Francisco pidió hoy a Scioli y su esposa que rezaran por él.
Durante el tradicional intercambio de regalos, el gobernador le obsequió con unos recuerdos realizados por artesanos de Buenos Aires y unos alfajores.
La visita de Scioli al Vaticano se acordó en el marco de las inundaciones que causaron decenas de muertos y miles de damnificados en la ciudad bonaerense de La Plata en abril pasado, cuando el papa se comunicó con el gobernador para expresarle su solidaridad por la tragedia.
El último encuentro mantenido entre ambos se había producido en noviembre de 2012 en Lujan (Argentina) en la tradicional peregrinación de los jóvenes, y en la que el por aquel entonces cardenal Jorge Mario Bergoglio ofició la misa central.