(EFE/InfoCatólica) En Kumkapi, un individuo no identificado se plantó frente a la Iglesia de Surp Asdvadzadzin durante la liturgia de Pascua y realizó siete disparos al aire, desatando el pánico entre los feligreses armenios. Inmediatamente, el asaltante se marchó a pie, antes de que la policía llegase al lugar. En la pared de la iglesia se encontró una pegatina reclamando la reapertura del museo de Santa Sofía como mezquita, una campaña que está cobrando fuerza en el último mes, y cuyos responsables aseguran contar ya con siete millones de firmas a favor de la idea.
El incidente se produce una semana después de los asaltos contra las iglesias de la Nueva Esperanza en Atasehir, y la de San Juan en la isla de Burgazada, en el Mar de Mármara. El pasado sábado 27 de abril, en Atasehir, un grupo de entre treinta y cuarenta exaltados rodeó el edificio, destrozó los cristales a pedradas y arrancó el cartel con el nombre de la iglesia. Además, trataron de forzar la puerta para penetrar en el edificio, sin conseguirlo. La única persona presente en el lugar, un misionero finlandés, resultó ileso. La iglesia apenas llevaba una semana abierta al culto.
Al día siguiente, una docena de adolescentes de entre 15 y 18 años atacó la iglesia de San Juan, en una de las Islas Príncipe, al sur de Estambul. Entre otros actos de vandalismo, rompieron varios muebles y destrozaron parte del interior del recinto. No obstante, fueron rápidamente detenidos por los vecinos de la propia isla, quienes les llevaron ante la policía. Al tratarse de menores de edad, fueron puestos en libertad al poco rato. Los locales indicaron que los jóvenes no eran residentes de la isla, por lo que se habrían desplazado a esta expresamente para realizar este ataque.