(Efe) Según Garzón, una acción en ese sentido «sería muy positiva» y constituiría «una muestra de cooperación y de apoyo a las víctimas del terrorismo de Estado».
El actual asesor de la Comisión de Derechos Humanos y Garantías de la Cámara de Diputados de Argentina y del Tribunal Penal Internacional de La Haya indicó que entre los archivos del Vaticano podría haber informes enviados por diplomáticos con información sobre la situación en Argentina durante el régimen de facto.
«Es conocido que durante la dictadura las víctimas acudieron a la Iglesia, al igual que Madres y Abuelas de Plaza de Mayo enviaron misivas al papa Juan Pablo II», dijo Garzón, quien indicó que la petición de datos al Vaticano debería ser cursada por los jueces que actualmente investigan los crímenes de lesa humanidad durante la dictadura.
El exmagistrado participó ayer en Buenos Aires en un homenaje organizado por el Gobierno de Argentina en honor de los inmigrantes víctimas de la última dictadura, en el marco de la conmemoración el próximo domingo del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.
«Es un reconocimiento, en una semana como ésta en que se conmemora el golpe de Estado de (24 de marzo de) 1976 y toda la represión que con ella se inició, de aquellos que habiendo sido acogidos en Argentina sufrieron las mismas consecuencias que los ciudadanos y ciudadanas argentinos por razones ideológicas, políticas y de forma absurda», dijo Garzón.
El homenaje coincide con la realización de un juicio contra exmilitares de la última dictadura involucrados en el denominado «Plan Cóndor» de coordinación de los gobiernos de facto del Cono Sur en las décadas de 1970 y 1980.
Cerca de 30.000 personas desaparecieron durante el régimen militar en Argentina, varios de ellos extranjeros, principalmente españoles, italianos, franceses, paraguayos, uruguayos y chilenos.