(Fides) En la misa de Roma estará presente también el cardenal egipcio Antonios Naguib, patriarca emérito de Alejandría de los coptos católicos, que en enero tuvo que abandonar el ejercicio de su ministerio patriarcal, por razones de salud. La sincronización con la que se celebrarán la Misa Pro Eligendo Romano Pontífice en Roma y la de entronización patriarcal en El Cairo representa según el Cardenal Naguib un elocuente y llamativo signo del misterio de comunión que abarca toda la Iglesia.
«Esta coincidencia providencial», confiesa el cardenal Naguib a Fides, «a su manera, nos hace sentir que el Señor cuida de su Iglesia. En ese momento, las oraciones por la elección del nuevo Papa y por el inicio del ministerio del nuevo patriarca copto católico se fusionarán y se alzarán juntas hasta el Señor Todopoderoso, quien nos hará sentir en unión con Jesús, en la comunión universal que abraza a la Iglesia universal y que se refleja también en los cardenales llegados a Roma de todas partes del mundo para participar en el Cónclave en oración, fe, esperanza y con el coraje del Espíritu Santo. Durante la misa en El Cairo».
El cardenal Naguib asegura que «habrá algunas intenciones de oración por la elección del nuevo Papa. Mientras que yo, en San Pedro, oraré por la Iglesia en Egipto y por el comienzo del Patriarca Su Beatitud Ibrahim Sidrak».
El purpurado, como patriarca emérito, iba a presidir la misa por la entronización de su sucesor si no hubiera tenido que ir a Roma para el cónclave. «Ahora seguiré unido a todos en oración», confiesa a la Agencia Fides el Cardenal egipcio «y cuando regrese al Cairo, podre llevar al Patriarca copto ortodoxo Tawadros II el saludo fraterno del nuevo obispo de Roma».