(El Confidencial/InfoCatólica) La pelota está ahora en el tejado del Gobierno, que antes de pronunciarse sobre esa demanda debe resolver el fenomenal desbarajuste que recorre el sector audiovisual y que le plantea todo un tour de force legal. A finales de 2012, Industria había prácticamente cerrado con la cadenas un acuerdo sobre la nueva distribución de sus frecuencias para liberar la parte del espectro radioeléctrico comprometida con las telecos, el denominado dividendo digital. Una mudanza que pasaba por la eliminación de dos múltiplex -ancho de banda que permite la emisión de cuatro canales-, en concreto uno de TVE y otro autonómico. Hasta que una sentencia del Tribunal Supremo fechada el 27 de noviembre lo cambió todo.
El Alto Tribunal volvía la vista hacia la era Zapatero y declaraba nulo el acuerdo del Consejo de Ministros del 16 de julio de 2010 «por el que se asigna un múltiple digital de cobertura estatal a cada una de las sociedades licenciatarias del servicio de televisión digital terrestre del ámbito estatal». Una decisión que obliga a los Mediaset, Antena 3, Vocento o Unidad Editorial a devolver sus nuevos canales, ya que el Supremo entiende que estos nunca deberían haberse concedido a dedo y sí tras la celebración de un concurso. Es en ese río revuelto donde busca pescar ahora el medio de comunicación de la Conferencia Episcopal, mientras Gobierno y cadenas negocian una solución a contra reloj dentro de la reforma del dividendo digital.
«Ahora no se sabe cómo quedará nada. Al principio, se eliminaban los múltiplex de TVE y el autonómico para ganar espacio en el espectro. Desaparecían sin más, no se pensaba en conceder nuevos canales. Sin embargo, ahora todo depende de cómo se aplique la sentencia del Supremo, si hay que hacer concursos... Aunque las conversaciones están avanzadas y el fallo debe aplicarse ya, no está claro que no vaya a haber nuevas licencias», exponen las citadas fuentes. Hoy por hoy, aunque TVE cuenta con dos múltiplex -equivalentes a ocho canales-, apenas emite cinco (La 1, La 2, Teledeporte, Canal 24 horas y Clan TV), además de la programación en alta definición. Esa falta de aprovechamiento del espacio es la que subraya el grupo Cope.
Una petición justificada
La Conferencia Episcopal tiene argumentos de peso para justificar su petición, con la vista puesta en sus competidores. «Al menos ellos tienen en antena un canal, 13tv, mientras que otros tienen licencias sin ser capaces de emitir. Los tienen todos arrendados», exponen fuentes del sector. En efecto, grupos mediáticos que recibieron del Gobierno Aznar el preciado múltiplex, allá por el año 2000, han fracasado por ahora en sus proyectos audiovisuales y se limitan a comercializar canales. Es el caso de Vocento, que controla Net TV y tiene alquilados los suyos a MTV y Paramount, este último como reemplazo de la fallida apuesta corporativa La 10. En esta línea, las cuatro frecuencias de Unidad Editorial están en manos de AXN, la propia 13tv, Marca TV -con los días contados y mirando al abismo de la teletienda- y Discovery Channel.
La solicitud de los obispos es de largo aliento, y se ha producido tanto con gobiernos populares como socialistas. Como publicó El Confidencial, la última ofensiva se produjo en junio pasado. «El Ministerio de Industria sabe desde hace tiempo cuál es la pretensión de la Conferencia Episcopal», explicaban entonces fuentes próximas a 13tv. La concesión de una licencia supondría la ruptura del contrato que la Iglesia mantiene con Unidad Editorial, la editora de El Mundo, que tendría que buscar nuevo socio para rentabilizar su frecuencia. No en vano, los operadores abonan anualmente 5,5 millones a Abertis por sus canales. Según fuentes conocedoras de la relación entre ambas sociedades, la institución eclesiástica se garantizó una cláusula de salida de ese contrato en caso de obtener una licencia propia.
El grupo Cope ya tiene camino recorrido, en tanto el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero certificaba el 22 de octubre de 2010 que KW Televisión, antigua denominación de la actual 13tv, cumplía con todos las exigencias para explotar un canal. «Una vez analizada la solicitud de arrendamiento, se ha comprobado que reúne todos los requisitos exigidos en la legislación, por lo que el Consejo de Ministros ha procedido a emitir su autorización. El arrendamiento implica la subrogación de KW Televisión en todos los derechos y obligaciones de Veo Televisión como prestador de servicios de comunicación audiovisual y como responsable editorial del canal arrendado», subrayaba la referencia publicada por Moncloa. La Conferencia Episcopal anunció en abril de 2011 la adquisición del 51% de 13tv.
