(Ep/Zenit) El director de la sala de prensa del Vaticano, Federico Lombardi, consideró que el viaje de Benedicto XVI a Estados Unidos ha alcanzado, "en medida casi insospechada", sus objetivos, en declaraciones a la emisora Radio Vaticana recogidas por Ep.
Lombardi describió la visita del Papa como un encuentro de "amistad, respeto y reconocimiento de las características positivas de este pueblo". "También ha alcanzado su objetivo de animar a la Iglesia católica americana, que ha vivido momentos difíciles como consecuencia de los conocidos escándalos sobre abusos sexuales", aseguró.
Según Lombardi, Benedicto XVI ha sabido enfocar este delicado asunto "con confianza hacia el futuro" y "convirtiendo la experiencia triste y dolorosa del pecado en un punto de partida hacia una renovada responsabilidad y una gran esperanza de poder volver a dar la propia aportación a la sociedad americana", sobre todo, desde el punto de vista "educativo, pastoral y espiritual".
El obispo de Roma ha mostrado cómo "Cristo ayuda a tener esa visión del hombre, de su destino, de la realidad de la persona humana que permite construir sobre cimientos sólidos el porvenir de la humanidad", explicó el padre Lombardi, quien recalcó que el Papa ha hablado a "todo un pueblo, ayudándole a identificar sus raíces y sus valores, su vocación histórica", pues "ha hablado al pueblo estadounidenses de sus características de convivencia entre muchos pueblos de culturas y creencias diferentes, para construir juntos, en libertad y democracia, una gran comunidad humana, que puede convertirse también para la humanidad misma en un mensaje de paz, de reconciliación, de convivencia".
Y esto se puede lograr, dijo Lombardi sintetizando al pontífice, "con el reconocimiento de Dios, de Dios creador, por tanto, de los valores esenciales de la persona humana, como imagen de Dios. El Papa lo ha dicho de manera muy explícita y los estadounidenses se han sentido comprendidos, reconocidos por su valor históricos y en sus mejores aspectos".
Añadió el portavoz de la Santa Sede que "incluso las máximas autoridades de los Estados Unidos, el presidente George W. Bush y el vicepresidente Dick Cheney en el discurso final, han reconocido al Papa esta capacidad para evocar los aspectos positivos del pueblo y de dirigirle un gran mensaje".
Como anécdota, el padre Lombardi comentó que "cuando el domingo por la noche pronunciaba su discurso conclusivo de Cheney, yo escuchaba a estadounidenses que estaban a mi alrededor diciendo: hace unos años no nos hubiéramos podido imaginar el que una de las máximas autoridades de nuestro país pronunciara palabras tan elogiosas sobre el jefe de la Iglesia católica". "Esto quiere decir -añadió el portavoz- que el pueblo, en todos sus aspectos, también a través de sus responsables, reconoce que la Iglesia católica y el Papa son interlocutores dignos y eficaces que ayudan a encontrar lo mejor del mismo pueblo estadounidenses".
Asimismo, subrayó que "el momento extremadamente feliz del encuentro con los jóvenes", que tuvo lugar este sábado por la tarde, "ha demostrado que esta Iglesia tiene el futuro por delante".
Por su parte, el presidente de Italia, Giorgio Napolitano, resaltó "los valores irrenunciables del respeto de la dignidad humana y de la convivencia pacífica entre todos los hombres y mujeres" que Benedicto XVI ha proclamado durante su visita a los Estados Unidos y, concretamente, a las Naciones Unidas. Napolitano acogió al Romano Pontífice con un saludo especial, tal y como suele hacer cuando el Papa vuelve de sus viajes en el extranjero.