(NoticiaCristiana/InfoCatólica) El presidente de Angola, José Eduardo dos Santos, creo una Comisión de Investigación para que indagara lo que había ocurrido en esa vigilia de la Iglesia Universal del Reino de Dios. La comisión ha pedido la suspensión de las actividades públicas de los grupos religiosos mientras la Procuraduría General de la Republica «profundiza en las investigaciones para averiguar si lo ocurrido fue un acto criminal».
Mientras se lleva a cabo la acción de la justicia, el gobierno ha culpado a la Iglesia Universal del Reino de Dios por el accidente que generó aglomeración en el interior y el exterior del estadio donde un gran número de personas, incluyendo ancianos, adultos, niños y jóvenes se hicieron presentes.
Según el informe oficial, el estadio solo tenía capacidad para unas 30.000 personas, pero durante el culto se reunieron «un total de 152.600 fieles, 35.000 en las gradas, 30.000 detrás de la portería norte, 30.000 detrás de la portería sur y 57.600 en el exterior, frente a la tribuna». 16 personas murieron por asfixia a consecuencia de la avalancha,
Se acusa a la IURD por su falta de organización, al no contar con personal cualificado suficiente para hacer frente a la multitud, ya que todo el servicio fue realizado por voluntarios. Se da además el agravante de que incluso después de las muertes ocurridas, la IURD no interrumpió el servicio religioso.
El gobierno llevará a cabo una supervisión severa de los templos en los próximos días y el ejecutivo angoleño pidió «a los fieles y a todas las iglesias en general mantener la calma y cumplir plenamente con las decisiones tomadas».