(Cope/InfoCatólica) El prelado ha resaltado además que en España «la generosidad de los fieles ha ido aumentando a medida que avanzaba la crisis». Ha recordado que con la crisis «ha crecido la solidaridad, los donativos, las colectas, de una manera muy participada, a través de los que van a la Iglesia». Pero, además de la ayuda económica, ha puntualizado el cardenal Rouco, ha aumentado el número de voluntarios entre jubilados y jóvenes.
El presidente de la Conferencia Episcopal Española ha defendido en el programa de Ernesto Sáenz de Buruaga la labor que desarrollan las Cáritas diocesanas «con los más desfavorecidos; personas que se enfrentan a desahucios y situaciones de exclusión familiar y social muy graves».
D. Antonio María ha destacado que «hay un sector de la juventud católica española y europea, que está unida a Iglesia como no lo ha estado en los últimos 40 años». Y ha puntualizado que «hay grupos de jóvenes para los que la fe es factor determinante de su vida. En estos momentos es el grupo más cohesionado de la juventud europea; una juventud católica que en el mundo pueden ser millones de personas».
En opinión del cardenal, en situaciones de crisis «no hay que sobredimensionar nunca el papel del Estado, la sociedad tiene una responsabilidad y la Iglesia también». Ha insistido en que un cristiano «nunca puede ser pesimista, ni ahora ni nunca, ni siquiera en el momento de la muerte».