(Agencias) Según ha informado el Ayuntamiento, los autocares turísticos tendrán que dejar y recoger a los visitantes en los espacios que se han habilitado en la Avenida Diagonal y no podrán hacerlo en las calles adyacentes del templo, donde las dificultades de movilidad y las molestias a los vecinos habían motivado muchas protestas.
Las actuaciones para mejorar la movilidad de la zona han consistido en crear una "zona de pacificación" del tráfico de autocares alrededor de la basílica, mejorar el espacio público para facilitar los desplazamientos a pie y ampliar el número de plazas de aparcamiento de autocares en la avenida Diagonal.
El ayuntamiento ha destacado que con estas medidas se consigue "el compromiso del equipo de gobierno municipal de dar respuesta a la presión que comporta tener uno de los monumentos más visitados del mundo en pleno distrito del Eixample, en una zona residencial",
La prohibición de acceso de los autocares a los alrededores de la basílica no afectará a los vehículos que lleven a grupos escolares y a los que trasladen a personas con movilidad reducida que hayan comprado la entrada para visitar la basílica anticipadamente.