(InfoCatólica) El cardenal lamentó que en algunos medios de comunicación existan contenidos superficiales que no contribuyen a la formación en valores de la sociedad.
“Hemos tomado un camino de desvío por el cual estamos muy comunicados, pero muy lejanos al mismo tiempo. La carta familiar, la visita a los enfermos, la palabra de cariño, el gesto de acogida se ha reemplazado por un mensaje de texto de cuatro palabras que no trasmite ni cariño, ni alegría, ni perdón. La tecnología está apagando el fuego del amor y eso es muy grave. Por eso el Papa nos dice que la comunicación superficial a veces hace más difícil la relación humana”, prosiguió el Arzobispo de Lima.
El prelado aseguró que “algunos medios nos invaden con ruidos, mentiras, campañas y con una comunicación que no da amor, ni fraternidad; y todo lo que da es dinero e intrigas. Volvamos a descubrir el calor de la cercanía, de la amistad y de la familia. Espíritu Santo ten piedad de nosotros, no dejes que el mundo se convierta en una Torre de Babel, en donde todos están muy cerca, pero muy alejados; todos muy comunicados, pero encerrados en el egoísmo; porque se habla mucho de paz y estamos llenos de violencia; se habla mucho de verdad y campea la mentira”.
No obstante, el Cardenal Cipriani reconoció el enorme aporte que las nuevas tecnologías de la información ofrecen al mundo. “No es que la tecnología no sea buena. Por supuesto que es muy útil saber dónde están los hijos o aquél amigo y al instante gracias a las tecnologías, pero eso no me da amor, alegría, cariño, amistad y cercanía”, refirió.
Dejar obrar al Espíritu Santo
En otro momento reflexionó sobre la importancia de dedicar momentos de silencio y oración en el día, para dejar actuar al Espíritu Santo. Para ello recomendó a los fieles alejarse del odio, la mentira, venganza, violencia y el egoísmo.
“Dejemos que el Espíritu Santo tenga silencio para que te pueda hablar. ¿En tu corazón hay odios, cóleras, mentiras o abusos?, porque donde hay todo es clima negativo no está el amor, la comunicación y la relación. Y estamos aislados con tanta tecnología”, señaló.
“El proyecto de la soberbia, de corregir a Dios, de rehacer los mandamientos y escoger los pecados a gusto de cada uno Dios lo interrumpió bruscamente”, explicó el Arzobispo de Lima recordando el pasaje bíblico de la Torre de Babel.
Finalmente pidió al Señor por las intenciones del Papa; así como por todos los fieles, especialmente por las familias. Estas reflexiones las dirigió en la solemne Misa de Pentecostés que presidió en la Basílica Catedral de Lima, el domingo 27 de mayo de 2012.