(EP/InfoCatólica) Los datos que ha difundido Fundación País Libre se elaboraron en base a información suministrada por el Ministerio de Defensa de Colombia. Algunas organizaciones civiles señalan que la cifra es aún mayor y hasta se atreven a asegurar que pasa del millar.
De acuerdo a la ONG, entre 2009 y 2011 se registraron unos 800 secuestros en Colombia, de los cuales 186 son atribuidos a las FARC y 85 a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), a los que hay que sumar todas aquellas personas privadas de su libertad en años anteriores y que, hasta la fecha, permanecen cautivas. En este grupo figuran cinco extranjeros, entre ellos, tres ciudadanos chinos.
Las FARC dejaron el lunes en libertad a los últimos seis policías y cuatro militares que tenían en su poder desde hace más de trece años en una histórica operación humanitaria, gesto con el que pretenden ratificar el anuncio del pasado febrero cuando se comprometieron a poner fin a esta práctica que ha caracterizado durante décadas ese grupo armado de tendencia marxista-leninista.
La liberación de los últimos uniformados ha sido aplaudida dentro y fuera de Colombia, y ha sido interpretada como el fin del secuestro en esa nación sudamericana, sin embargo, algunos sectores se muestran cautos ante las acciones que emprenderán a partir de ahora los subversivos.
La guerrilla llegó a tener en su poder a decenas de uniformados a los que pretendía cambiar por rebeldes presos en las cárceles colombianas como parte de su estrategia política, pero al mismo tiempo mantenía secuestrados a civiles a quienes utilizaba con fines económicos. El Gobierno nunca accedió a estas propuestas y los policías y soldados tuvieron que ser entregados de forma unilateral o rescatados mediante operativos militares.
Familiares, autoridades colombianas, la Iglesia Católica y organizaciones civiles, tanto nacionales como extranjeras, han reiterado este martes su llamamiento a las FARC y a todos los grupos armados a que liberen a todos los rehenes.
La Conferencia Episcopal de Colombia, concretamente, ha exhortado mediante una nota a los grupos armados a que "liberen cuanto antes" a los secuestrados "para que desaparezca definitivamente" en Colombia "el crimen atroz del secuestro y se consolide el respeto profundo a los derechos de todos y cada uno de los colombianos, base indispensable para la construcción de una sociedad justa y fraterna", señala la nota.
País Libre espera que la liberación de los militares y policías "sea un aliciente para seguir clamando por aquellos secuestrados con fines extorsivos económicos, en su mayoría civiles, que ante el país no tienen rostro pero que aún permanecen en cautiverio", señala un comunicado.