(EP) El caso más emblemático fue el arresto conjunto de Guillermo Fariñas, periodista independiente; Ángel Moya, un expreso de la llamada Primavera Negra de 2003; y el activista Jorge Luis Artiles, quienes permanecieron 72 horas encarcelados en la provincia de Villa Clara (centro) por haber protestado contra la detención de otros dos disidentes.
"Los patrones de represión política vigentes continúan aplicándose pero mostrando una clara tendencia, por lo menos a lo largo de 2011, al aumento de la violencia policial no provocada contra disidentes que han tratado de reunirse o manifestarse de manera pacífica", alerta la CCDHRN, organización no reconocida pero tolerada por las autoridades de la isla.
La oposición critica la actitud de las autoridades de la isla de tratar de "escudarse" en el principio de la "no intervención" en los asuntos internos de los países "como coartada para tratar de encubrir sus abusos sistemáticos en materia de derechos civiles y políticos" y así poder "disfrutar de amplios márgenes de impunidad".
En medio de este sombrío panorama que dibuja la disidencia, el pasado mes fueron excarcelados Ivonne Malleza, Isabel Álvarez e Ignacio Martínez, después de 51 días de detención bajo "condiciones infrahumanas", quienes por su condición habían sido adoptados por Amnistía Internacional como presos de conciencia.
Cuba cerró el año 2011 con un total 4.123 detenciones de corta duración contra opositores al Gobierno de Castro, de las cuales 796 se registraron en diciembre, cifra que la CCDHRN estima que es un "récord" nunca antes visto en los últimos 30 años.
Muerte de Villar
La oposición recuerda además la muerte, el pasado 19 de enero, de Wilman Villar Mendonza, tras más de 50 días de huelga de hambre en protesta por la condena de cuatro años a la que fue sentenciado en noviembre de 2011. La comisión insiste en que su muerte era "absolutamente evitable" y responsabiliza al Estado de lo ocurrido porque se trataba de una persona que estaba bajo su custodia.
"A pesar de los llamamientos formales al respecto, el Gobierno de Cuba no ha dado ningún paso visible para investigar y esclarecer todas las circunstancias que rodearon la agonía y el fallecimiento, funeral y entierro" de Villar, denuncia la CCDHRN.
Villar fue detenido el 12 de noviembre de 2011 y condenado dos semanas después a cuatro años de prisión por los delitos de desacato, resistencia y atentado. Era miembro de la Unión Patriótica Cubana, una organización que se creó a mediados del año pasado pero que no ha sido reconocida por el Gobierno de Castro.