(Fides) Pradhan ha sido acusado de colaborar con los naxalitas y con la guerrilla maoísta en la región, mientras que sobre Digal cae la acusación de llevar a cabo “conversiones ilegales y fraudulentas”.
En una nota enviada a la Agencia Fides del Consejo Mundial de Cristianos Indios, una asociación ecuménica que defiende los derechos de los cristianos, se dice que en ambos casos, se trata de “acusaciones falsas con la intención de intimidar y desacreditar a los líderes cristianos comprometidos con los derechos, las libertades, la promoción y el desarrollo social de los cristianos en el distrito de Kandhamal”, que aún tienen las cicatrices de la violencia. Hoy en día los fieles cristianos se encuentran en una posición de desventaja, en la sociedad son discriminados y no han recibido una indemnización adecuada ni justicia en los tribunales.
Como informa a la Agencia Fides el Hermano K.J. Markose, un misionero Monfortiano y activista de los derechos humanos que trabaja en Orissa, “la comunidad cristiana en el distrito de Kandhamal se está volviendo más y más valiente y los fieles comienzan a hacer valer sus derechos como ciudadanos indios”. A Raikia -donde fue detenido el pastor Digal- se desplazó hace unos días, en una visita pastoral, monseñor John Barwa SVD, Arzobispo de Cuttack-Bhubaneswar, llevando consuelo y esperanza a las familias. Los cristianos, remarcó el arzobispo, “están saliendo de las catacumbas”, e incluso durante las liturgias de Navidad, se han celebrado varias reuniones públicas y se ha mostrado el valor de testimoniar la fe abiertamente.