(El Nuevo Herald/InfoCatólica) “¿Qué nos da la fe en Jesucristo?”, pregunta el arzobispo de Miami frente a un árbol de Navidad en el primer anuncio. “Nos da una familia”, responde. Luego le recuerda a los televidentes católicos que no son seres solitarios, “pues el Señor de todo el universo decidió hacerse nuestro hermano y al hacerlo nos hizo miembros de su familia”.
La campaña navideña, en inglés y español, se inscribe en el esfuerzo de Mons. Wenski por atraer a los católicos al seno de la Iglesia con un renovado espíritu. Esta es la tercera ocasión en que la Arquidiócesis de Miami produce y transmite un anuncio de televisión durante el tiempo de adviento que precede a la Navidad para invitar a los católicos que no acuden a la Iglesia a integrarse en la familia cristiana.
La invitación es para personas que no asisten a la iglesia porque han perdido la fe o se sienten culpables porque creen que han hecho algo imperdonable, según el arzobispo. “Muchas veces, cuando un católico pasa mucho tiempo fuera de la iglesia, le cuesta trabajo dar marcha atrás porque se siente apenado”, precisó el arzobispo. “Yo le quiero decir que si se presenta va a ser bienvenido y que estaremos contentos de verlo”.
La arquidiócesis compró más de 700 espacios de 30 segundos cada uno para transmitir el anuncio hasta la Navidad, dijo la vocera Mary Ros Agosta, quien no divulgó el costo de la iniciativa. “Por divina providencia”, indicó, Comcast les dio “un buen precio”.
Imitar a Dios, quien se regaló a sí mismo
Además, el arzobispo de Miami grabó dos videos que se emitirán en el Canal 23 de Univisión, uno para la Nochebuena y otro para el día de Navidad. “En este Niño de Belén, Dios nos ofrece las pautas por las cuales la humanidad debe vivir”, pregona el arzobispo en el primer anuncio de 30 segundos. “Navidad es para nosotros un festival de regalos, precisamente porque debemos imitar a Dios quien se ha regalado a sí mismo a nosotros”.
En el segundo anuncio, Mons. Wenski recuerda a los fieles que “a pesar de nuestros pecados, no estamos perdidos”. “Dios se niega a darse por vencido en su creación: fue por amor que El nos creó; y en el amor somos redimido”, sostiene. “Dios, nuestro Padre, nos ha enseñado su amor en el nacimiento de su único Hijo, y nos llama a cada uno de nosotros a que sigamos sus pasos y cambiemos nuestras vidas, como lo hizo El en un regalo de amor”.
Para Mons. Wenski, hablar frente a las cámaras de televisión no es algo nuevo. En abril pasado, grabó otro anuncio en inglés y español para promover una jornada masiva de confesión en cuarenta parroquias de los condados Miami-Dade, Broward y Monroe. Durante ese Fin de Semana de Reconciliación, entre 5,000 y 8,000 católicos se confesaron con cientos de sacerdotes que prestaron sus servicios.
Causas del desarraigo
El arzobispo cree que muchos católicos están desafiliados de la Iglesia porque al haberse desplazado de un país a otro, como es el caso de la población inmigrante, las personas pierden el vínculo con la parroquia a la que asistían y en este nuevo país les cuesta reconectarse.
Lucía Baez Luzondo, directora de la Oficina de Vida Familia de la Arquidiócesis, dijo que los católicos en Miami se sienten fuera de casa tanto en su vida personal como en su vida de fe, por estar lejos de lo que es conocido para ellos. “Especialmente en este tiempo de Adviento donde esperamos la llegada del niño Dios en nuestros corazones”, indicó Baez, “queremos recordarles que toda la Iglesia local de Miami tiene sus puertas abiertas y les invita a encontrar en nuestra familia de fe su nueva familia, unidos por el amor de nuestro Señor Jesucristo”.
