(Efe) El entrevistador le preguntó entonces a qué papa le había mandado el libro, a lo que Sarandon contestó que al "último" (Juan Pablo II), y “no a este nazi que tenemos ahora”. Cuestionada sobre el uso de ese calificativo para referirse a Benedicto XVI, la actriz insistió en llamarle “nazi”.
El colectivo por la tolerancia en EEUU Anti-Defamation League (ADL) solicitó ayer que Sarandon pidiera disculpas a la comunidad católica y “a todos aquellos que hayan podido sentirse ofendidos” por sus afirmaciones.
“La señora Sarandon puede tener sus diferencias con la Iglesia Católica, pero eso no es excusa para lanzar analogías nazis. Esas palabras son odiosas, vengativas y solo sirven para disminuir la verdadera historia y sentido del Holocausto”, dijo el director nacional de ADL, Abraham H. Foxman.