(Efe) En cuanto a este proyecto de ley, el Gobierno ha encargado al comité de justicia nacional, que pertenece al Consejo de Ministros, que agilice los trámites para darle su aprobación final dentro de dos semanas.
El Consejo encomendó también a un comité presidido por el titular de Justicia investigar los sucesos del domingo, en los que murieron 24 personas y más de 200 resultaron heridas, y aclarar las circunstancias acerca del incendio de la iglesia que detonó los enfrentamientos.
El Gobierno “decidió hoy (...) formar un comité para investigar los lamentables sucesos, que se pondrá en marcha de inmediato para esclarecer los motivos y consecuencias de los sucesos y anunciar los resultados lo antes posible“.
La junta militar que dirige en la práctica Egipto había anunciado previamente que dio instrucciones al ejecutivo para la formación de ese comité.
El Consejo de Ministros aprobó también añadir un artículo nuevo al capitulo 11 de la Ley de Sanciones con el fin de prohibir la discriminación. De este modo, se decidió castigar con la prisión y con una multa de entre 30.000 (unos 5.000 dólares) a 50.000 libras egipcias (8.400) o por uno de los dos castigos a cualquier persona que ejerza cualquier acto que pueda incitar actos de discriminación entre personas por sexo, origen, lengua o religión.
Por otro lado, también se aprobó una sanción de cárcel por un periodo no menor a 3 meses o una multa de 50.000 a 100.000 libras (16.700 dólares) o las dos penas para castigar un acto de discriminación contra algún funcionario público.
Además, el Consejo de Ministros decidió reforzar las capacidades de las fuerzas de seguridad para que puedan cumplir con sus deberes, hacer frente a todos los actos ilegales y aplicar las leyes.
Durante la reunión, que duró 6 horas, el Gobierno pidió al pueblo egipcio, a los grupos políticos y a los responsables religiosos, que asuman “sus responsabilidades para proteger la patria, su integridad y estabilidad“. También criticó los sucesos de ayer y “todos los intentos por crear una fractura entre el pueblo y las Fuerzas Armadas“.
Advirtió, además, sobre “la gente que intenta abortar la revolución y hacerla fracasar“ y pidió a los medios de comunicación que eviten en sus informaciones “provocar sentimientos que puedan dañar los intereses de la patria“.
Los coptos han acusado a la televisión estatal egipcia de presentarles como los iniciadores de los disturbios de anoche, los más graves desde la Revolución del 25 de Enero, que puso fin al régimen de Hosni Mubarak.