(Efe) El arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal ha destacado el “empeño” que está poniendo Cáritas en ayudar a la salida de la crisis, con dinero de la Iglesia, y ha subrayado además que a través de la contribución que recibe todos los años destina una parte a esa institución caritativa.
Según el “Anuario de la laicidad en España 2011”, elaborado por la “Fundación Ferrer Guàrdia; Laicidad y Pensamiento Libre”, la Iglesia católica recibe del Estado “entre 7.000 y 10.000 millones de euros” anuales.
En unas escuetas declaraciones, el cardenal ha dicho también que él no es un “superobispo” para resolver el conflicto que mantienen los obispados de Barbastro-Monzón y Lérida por los bienes de las parroquias de la parte oriental oscense. El presidente de la Conferencia Episcopal ha recalcado que éste es un organismo de colaboración de los obispos entre sí pero “no es una titular de autoridad sobre los obispos”.
Ha remarcado, no obstante, que la Santa Sede ya ha actuado, con sentencias en favor del obispado de Barbastro-Monzón, y lo que hay que hacer, ha dicho, es “obedecerlas”. Ha insistido en que en la resolución de este conflicto no es una cuestión de “mediar”, sino de que se sigan las normas del Derecho Canónico, que se cumpla y que se lleve al campo del derecho civil.
El presidente de la Conferencia Episcopal ha hecho estas breves declaraciones con motivo de su participación en la XXII Jornada Mariana de la Familia en Torreciudad.