(Zenit) “El hilo rojo del libro es la extraordinaria “normalidad” de los santos, unida a la fiebre de vida que caracteriza cada momento de su existencia, lograda gracias a la intensidad y a la concreción de su capacidad de amar”, añade el periódico vaticano.
En la contraportada de este libro, de 93 páginas, se lee que “una vida santa no es fruto principalmente de nuestro esfuerzo: es la vida misma de Cristo Resucitado que nos es comunicada y que nos transforma”.
Doctores de la Iglesia como Pedro Canisio, Roberto Bellarmino, Francisco de Sales, Alfonso María de Ligorio han “dejado la ventana abierta al Espíritu Santo” aceptando ser cambiados, destaca el Papa, y añade que lo mismo puede hacer con cada uno de nosotros.
Entre las citas del Pontífice, se encuentra una del libro de la Vida de Santa Teresa de Ávila, cuando recuerda que rezar significa “tratar de amistad, estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos nos ama”.
“Sinceridad, cortesía, cultura, alegría vienen comunicadas por ósmosis y florecen en el interior de la amistad con Dios –concluye L’Osservatore Romano-, como sugiere la serenidad luminosa y “danzante” del Juicio universal del Beato Angélico, la última imagen del libro”.