¡Vivan los niños con síndrome de Down!

¿Quién sería capaz de mirar a los ojos de estos niños y negarles su dignidad? ¿Quién se siente con derecho a definir y a establecer el concepto de “normalidad”, más allá del cual el derecho a la vida quedará sin protección?

A veces, Dios permite ciertos sucesos, para que podamos comprobar de forma evidente e incuestionable, la deriva tan errónea por la que se conduce nuestra cultura, pues con frecuencia ocurre que solamente reaccionamos ante el mal, cuando hemos llegado a ver su rostro en toda su crudeza.

Me estoy refiriendo a un caso que se hizo público en Milán (Italia) a finales de verano: Una mujer embarazada de tres meses, esperaba gemelos. Al hacerse la prueba de la amniocentesis, se le comunica que uno de los gemelos tiene el síndrome de Down, por lo que solicita un aborto selectivo. Llegado el momento de la intervención, los fetos se intercambian su posición y la doctora elimina por equivocación al “sano”, dejando vivo al que quería matar. Comprobado el error, tras los pertinentes análisis, días más tarde, la madre decide acabar también con el gemelo Down que continuaba vivo en su seno.

El caso es especialmente dramático, pero la cuestión de fondo no varía con respecto a los demás casos de aborto: El problema moral está en el endiosamiento de nuestro deseo. Perseguimos una realidad a medida de nuestros planes, y cuando las expectativas no se cumplen, somos capaces de autoerigirnos en dueños de la vida del prójimo, sin detenernos ante nada. Esta es la inquisición contemporánea: ¡nuestra santa voluntad!: Si un niño es deseado, hoy en día podemos llegar a mimarlo hasta hacer de él nuestro tirano; y si no fuera deseado, procederemos a eliminarlo sin miramientos. Soy consciente de la dureza de estas palabras, pero estaría falseando la realidad si cayese en la tentación de dulcificarlas. Me limito ahora a añadir una serie de reflexiones complementarias:

+ La dignidad de los síndrome de Down: ¿Somos conscientes de que los síndrome de Down han desaparecido prácticamente de nuestra sociedad? Bien es verdad que todavía conocemos algunos de edad más avanzada, pero… ¿dónde están los menores de 10 años, por ejemplo? Estamos ante uno de esos tabúes de los que a nadie le gusta hablar, porque presentimos muchas complicidades encubiertas.

¿Quién sería capaz de mirar a los ojos de estos niños y negarles su dignidad? ¿Quién se siente con derecho a definir y a establecer el concepto de “normalidad”, más allá del cual el derecho a la vida quedará sin protección?

+ La prueba de la amniocentesis: A raíz de este triste episodio de Milán, el presidente de la Sociedad Española de Ginecología, Manuel Bajo Arenas, explicaba que «…si una embarazada se somete a la amniocentesis, normalmente aborta si el resultado es positivo. Si no, ¿para qué se iban a hacer la prueba?». Lo cual plantea la responsabilidad moral de quienes, en su intencionalidad, se hacen cómplices de este grave pecado. La forma tan trivial en la que se oferta y realiza la amniocentesis en el sistema sanitario, está contribuyendo a desdibujar en muchas conciencias el principio de la inviolabilidad del don de la vida. Es un contrasentido que un diagnóstico médico se convierta en una sentencia de muerte.

+ Autopsia obligatoria: Parece que a nadie le llama la atención el hecho de que el diagnóstico de una amniocentesis sea suficiente para autorizar un aborto y que, sin embargo, posteriormente no se exija una autopsia para comprobar si verdaderamente el diagnóstico había sido acertado. ¡Cuántas sorpresas nos llevaríamos si pudiésemos comprobar la veracidad de tantos alarmismos a los que se recurre para cubrirse las espaldas! ¿Quién no conoce a alguien, que según diagnóstico médico, tendría que estar muerto hace tiempo?

+ Lo más grave, la impenitencia: En el momento en que aquellos padres, cuyo nombre desconocemos –y preferimos que así sea- supieron que el gemelo “sano” había sido eliminado por error, dispusieron de una ocasión de oro para reparar el error cometido. Pudieron haber interpretado lo ocurrido como una llamada a rectificar sus valores de vida... Tras lo sucedido, podrían haber comprendido que el «error» no había estado en la elección del feto, sino en el aborto mismo. Pero, sin embargo, ¡¡volvieron a tropezar en la misma piedra…!! Quizás esto sea lo más grave de este caso –y no me estoy ahora refiriendo a esos padres-: el hecho de que nuestra sociedad mantenga la permisividad ante el aborto, a pesar de que seamos testigos de tantos dramas.

+ ¡Cuida de tu hermano débil!: Cuando en nuestras familias cristianas nacía un hijo con algún tipo de minusvalía o enfermedad crónica, nuestros padres nos inculcaban y educaban para que fuésemos sus custodios hasta el fin de sus días: “¡Cuida siempre de tu hermano débil!” –se nos decía-. Ahora resulta que ha sido el gemelo sano quien ha dado una lección a sus padres sobre cómo cuidar a su hermano enfermo. ¡Paradojas de la vida! Como también es una paradoja que haya miles de familias deseosas de adoptar y abiertas a acoger en adopción a quienes otros han desechado. ¡Que “vivan” los síndrome de Down!

+ José Ignacio Munilla Aguirre, Obispo de Palencia

Artículo publicado en octubre del 2007

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10 comentarios

se que sucedio anos atras pero dverdad es una pena grande por estos padres no saben lo que se han perdido
o quizas no estaba en capacidad de serlo. sea cual sea el motivo. espero que se hayan arrepentido. y que claro esta uno no elige el tipo de bebe que quieres tener. ni ellos eligen los papas a tener
es la voluntad divina que nos premia y nos da el reto de sacar adelante a nuestros hijos.es como una loteria que tu no lo jugastes pero lo ganastes. solo queda aceptarlo con fuerza y coraje.bendiciones acada millones de papas del mundo que tuvieron la oportunidad de ser premiados con bebes con el sondrome dawon(trisomia 21).muchas benciones.tvt
19/07/10 11:41 PM
Marianela Freire
Yo soy Madre de un niño Síndrome de Down y puedo dar fe de lo maravillosos que son, mi hijo se llama Patricio Andrés, tiene 12 años de edad y además se encuentra combatiendo una leucemia Linfoblástica Aguda que se le presentó en el año 2003. Pero siempre le digo a Dios, Nuestro Señor, que si no me lo hubiera dado, pues de lo que me hubiera perdido. Es mi tesoro mas preciado aquí en la tierra. Bendiciones al Monseñor José Ignacio Munilla.
1/07/12 4:13 AM
Ines
http://www.elintransigente.com/notas/2008/12/26/cultura-9760.asp

En este enlace hay un testimonio de algunos de las curaciones producidas por la Virgen en sus apariciones de Salta, Argentina.

Todos los años hay una peregrinación de familias con chicos especiales, hay testimonios de que algunos ven a la Virgen.

La vidente de la Virgen, María Livia, siempre les dice a las madres que sus hijos son hermosos a los ojos de Dios y que son una bendición para ellas.
23/07/12 2:39 PM
Juan Mariner
Una diferencia de los católicos en relación a los demás debe ser la escrupulosa defensa de la vida desde el momento de la concepción.

La madre italiana que aborta a los dos gemelos es un engendro de nuestra época: los hijos como un bien más de consumo con los que debemos presumir ante los vecinos de igual calaña, los hijos que no alteren demasiado nuestros planes de vida alegre y feliz, los hijos que reflejen nuestro "éxito" social...
23/07/12 8:31 PM
Grumete
Buenos días:
seamos sinceros con nosotros mismos. Soy padre de una niña (un año)con SD a la que adoro tanto como a sus cuatro hermanos. Ana hubiese nacido de todas todas pero nos enteramos que era SD tras el parto, casi mejor por que así era Ana que era SD y no un niño con SD al que se espera sin saber que pasará. Creo que nadie desea tener un hijo SD (no sabeis lo que os perdeis) pero la gran diferencia estriba en si lo acogerás y amaras o te pasarás la vida maldiciendo por ello o peor maldiciendote por haberlo matado.
Ana nos ha abierto los ojos del amor, generosidad, entrega a toda la familia. Ana ha sido una bendición, un regalo de Dios inmerecido para nuestra familia y cada vez estoy más convencido que para el resto del mundo.
24/07/12 8:18 AM
Juan Mariner
La enhorabuena por las sabias palabras de un PADRE con mayúsculas: Grumete.
24/07/12 1:06 PM
Melillo
Llegará el dia y ha llegado ya en que sólo las familias cristianas tengan hijos con algun tipo de discapacidad ya que resto habra seleccionado a sus hijos, como su gran maestro Hitler (gran padre de la cultura de la muerte).

La alegria de ser cristiano es como dice la Escritura considerando al hermano superior a ti, o lo que es lo mismo, considar dignos a todo hombre sea cual sea su condicion.

Mi mujer esta embarazada y fuimos al medico y dijimos que no queriamos ninguna prueba tipo amiocentesis o analisis de sangre para saber lo del SD, porque nosotros amariamos a este hijo que Dios nos ha regalado venga como venga.

Aviso a futuros padres catolicos: para nuestra desgracia cada vez hay mas medicos que son nuestros enemigos, tened cuidado y enfrentaos a ellos en la Verdad y si no buscad médicos catolicos o médicos que defiendan la vida que los hay.

Amen a todo lo del obispo.
24/07/12 7:01 PM
pedro de madrid
Tengo un hijo síndrome down con 27 años (tengo más hijos) es una bendición, es inocente, buenísimo lee y escribe bien y va a talleres, no pierde una misa festiva, con su libro de misa y la sigue bien, es una bendición, cuando el Señor se lo lleve, creo sin duda alguna a donde va a ir su alma, lo que para la mía, tengo que luchar. Dios sea bendito.
24/07/12 10:10 PM
Edu
http://www.elnortedecastilla.es/20120724/local/valladolid/angela-bachiller-puede-primer-201207242301.html

Ojalá esta noticia se haga realidad ...

Ángela Bachiller puede ser el primer edil en España con síndrome de Down
25/07/12 12:59 PM
Edu
otra buena noticia:
http://www.elmundo.es/yodona/2012/07/25/moda/1343208967.html

La firma española Dolores Cortés busca hacerse un hueco en el mercado estadounidense y, para ello, ha querido aprovechar, a su vez, para dar una oportunidad a otra persona. Una niña de diez meses, rubia, de ojos grises y de Miami, es la protagonista de su catálogo de baño y su campaña para niños en el mercado americano. Valentina Guerrero, que así se llama la pequeña modelo, es un bebé simpático y sonriente y además tiene síndrome de Down.
25/07/12 1:57 PM

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