(Efe/InfoCatólica) “Basta ya de discriminación a los evangélicos” ha sido uno de los lemas más coreados por los manifestantes, un millar según el cálculo facilitado a Efe por los convocantes, que llegaron a cortar al tráfico durante cinco minutos en dos carriles laterales.
El Consejo Evangélico de Madrid (CEM), recogiendo la denuncia de una “amplia plataforma” de pastores e iglesias madrileñas, denuncia la “reiterada y grave discriminación” con los templos protestantes por parte de varios municipios de la Comunidad de Madrid, y en especial del Ayuntamiento de la capital.
La situación se ha “recrudecido” en los últimos meses, ha asegurado a Efe Pedro Tarquis, portavoz del CEM, “lo que ha dejado sin sus iglesias a miles de madrileños”, ha agregado. Se da la circunstancia de que el gobierno municipal de Gallardón ha clausurado ya más centros de culto protestante que Franco durante su régimen.
Tarquis sostiene que el problema surge porque “no se ha reglamentado la normativa para los espacios de culto no católicos, lo que está provocando que se aplique la normativa propia de actividades comerciales como discotecas, pubs, espectáculos públicos u otros, dependiendo del criterio de cada distrito municipal, afectando así su aplicación estricta o caprichosa a los derechos fundamentales garantizados por la Constitución Española”. Además, ha añadido, se suma la falta de reserva de suelo en los planteamientos municipales para los templos.
La teniente de alcalde y 'número 2' de la lista del PP de Madrid a la alcaldía de la capital, Ana Botella, se reunió el sábado pasado con líderes protestantes y prometió buscar soluciones tras los comicios, según el CEM.
Evitar discriminaciones
Tras la manifestación, los convocantes han presentado en el registro del Ayuntamiento un documento detallado de los templos protestantes afectados en la actualidad y una serie de reivindicaciones entre las que destaca la paralización de los expedientes de precinto, clausura o cierre de los locales de culto evangélico.
No quieren un trato de favor, ya que defienden cumplir las normas de seguridad y sanidad, pero sí que se evite “un claro trato discriminatorio”. Para ello, piden la formación de una comisión paritaria compuesta por miembros del Ayuntamiento con la participación de las instituciones representativas del conjunto de la iglesia evangélica en Madrid para el desarrollo de la normativa y la solución de todos y cada uno de los casos.