(Agencias/InfoCatólica) El cardenal Rouco ha efectuado estas declaraciones a los periodistas momentos antes de pronunciar la ponencia titulada “Anunciar a Dios en la sociedad española contemporánea”, dentro del curso “Dios en la sociedad postsecular”, organizado por la Facultad de Teología San Dámaso, la Universidad CEU San pablo y la Universidad Católica de Ávila (UCAv).
Quien gobierna no está por encima de la ley
Respecto a la postura de los presidentes autonómicos que se han negado a aplicar la Ley del aborto, el Cardenal, ha dicho que “una cosa es el principio de separación entre la vida pública y la vida privada y otra distinta las responsabilidades morales y éticas que tiene un gobernante en relación con la ley vigente. En un sistema jurídico como el nuestro, tiene que aplicarla, y si no la aplica tendrá que renunciar a su cargo”.
Luego ha puntualizado que “hay que aplicarlo a las situaciones concretas, porque para un gobernante es una obligación, tiene la obligación del sistema jurídico vigente en una democracia de cumplir la ley. No está por encima de la ley. Otra cosa es qué hace con su conciencia ante una ley que es injusta. Eso es un problema que habría que ver en cada caso cómo se resuelve”.
Sentencia del TC
No obstante, se ha mostrado confiado en que el Tribunal Constitucional (TC) declare inconstitucional “algunos aspectos” de la norma porque, en su opinión, “tiene que ver con la interpretación a la luz de la Constitución”, en la que, según ha destacado, “se garantiza el derecho a la vida de todos”.
El presidente de la CEE se ha referido asimismo a la “forma” en la que el Constitucional “trató la constitucionalidad de la primera ley” --en el año 1984--, cuando “declaró que el embrión, el concebido, desde el primer momento de su existencia, es un bien constitucionalmente protegido” al que “se le suma otro bien mayor”, ha recordado.
“Con esa doctrina del Tribunal Constitucional y como jurista, y no desde el punto de vista de la Teología o de la visión teológica del problema, sino desde el análisis técnico de la cuestión, es muy difícil poder admitir que sea libre el aborto en las 14 primeras semanas del embarazo”, ha asegurado.