(CEE/InfoCatólica) El tema de la misericordia vivida y testimoniada por el sacerdote es una dimensión primordial y capital de su vocación concreta: la relación con Cristo pastor misericordioso; una relación que debe ir creciendo gradual y paulatinamente durante los años de formación en el seminario.
El cartel de la campaña, además del lema, muestra el recorrido de “Una vida apasionante” donde se ven los diferentes momentos significativos del ministerio sacerdotal. La vida y la misión del sacerdote, aunque ardua y delicada, sigue resultando apasionante para muchos jóvenes.
La iniciativa del “Día del Seminario” nació en 1935. Desde entonces, cada año la Jornada llega con un nuevo lema y el objetivo de suscitar vocaciones sacerdotales mediante la sensibilización, dirigida a toda la sociedad, y en particular a las comunidades cristianas.
Como el día de San José no es siempre fiesta civil en todas las comunidades autónomas de España, desde hace un par de décadas la Jornada del Seminario se celebra el 19 de marzo y también en el domingo más próximo. Con todo, la Iglesia ha conservado para la festividad de San José el carácter del día de precepto.
El Papa nos recuerda que sigue siendo imprescindible un cuidadoso discernimiento vocacional y “como en los tiempos difíciles del Cura de Ars -escribe Benedicto XVI en el Mensaje con motivo del Año Sacerdotal- es preciso que los sacerdotes, con su vida y obras, se distingan por un vigoroso testimonio evangélico”.