(Efe/infoCatólica) Ninguno de los otros obispos que aspiraban llegar al EKD -y que hubieran podido competir con Kässmann por la Presidencia- logró la mayoría suficiente en ninguna de las tres rondas de votación.
La elección del presidente del EKD se da en tres pasos. Primero, se eligen los 14 miembros del organismo que luego, a puerta cerrada, tienen que ponerse de acuerdo sobre un candidato para la Presidencia. Éste, posteriormente, deber ser presentado a consideración del congreso sinodal.
Mujer alemana del año
Kässmann es una de las caras más conocidas dentro de los protestantes alemanes y su popularidad la llevó incluso a ser elegida como la Mujer Alemana del Año en 2006.
Cuando fue nombrada obispo, hace diez años, hubo protestas por parte de los críticos conservadores que han visto siempre con sospecha su talante innovador y progresista.
Los reveses que ha tenido en su vida personal, en especial su divorcio y un cáncer que terminó superando, los ha asumido abiertamente y ha hablado sin reservas de ello ante la opinión pública.
Su divorcio causó algunas discusiones, puesto que los sectores más conservadores del protestantismo alemán sostenían que una mujer divorciada no debía seguir ejerciendo el obispado.
Crítica con la enseñanza de la Iglesia Católica sobre homosexualidad
Kässmann se ha mostrado en repetidas ocasiones muy crítica con la enseñanza de la Iglesia Católica sobre las relaciones homosexuales -que ella aprueba-, así como sobre la forma de impedir la expansión del Sida -la obispa luterana está a favor del uso del preservativo-. También ha manifestado su oposición al celibato obligatorio y a la negativa de católicos y ortodoxos a ordenar mujeres.