(ACI/InfoCatolica) En declaraciones a Europa Press, Carlos Amigo Vallejo lamentó la iniciativa protagonizada por la consejera de Salud, María Jesús Montero, en cuanto al impulso de esta futura normativa autonómica que sería pionera en el conjunto de España. Para el cardenal Arzobispo de Sevilla, el Gobierno andaluz debería preocuparse "por encima de todo" por la "calidad de vida" de las personas. "Procurar que el hombre pueda vivir con total dignidad", dijo Amigo Vallejo en contraposición a esta futura Ley de dignidad en el proceso de la muerte.
Según recordó, "lo auténticamente digno es la vida" y las personas son "intocables" "desde su nacimiento hasta el final", argumentos que esgrimió a la hora de calificar esta iniciativa parlamentaria como "un entretenimiento absurdo e indigno para las personas". Así, reclamó que el Gobierno autonómico que preside Manuel Chaves se vuelque en "la calidad de vida" de las personas en favor de la "dignidad" de la vida.
Además, lamentó que sean las corrientes o "sectores progresistas o de izquierdas" las que promuevan leyes de esta naturaleza, dado que desde su perspectiva resulta "sorprendente" que estas fuerzas impulsen normativas cuyos perjuicios afectarían especialmente a los colectivos sociales más desfavorecidos.
Las previsiones de María Jesús Montero en cuanto a esta futura Ley pasan por entregar al Consejo de Gobierno un borrador en el mes de octubre para dar comienzo a su trámite y debate parlamentario durante el verano de 2009, aunque la veintena de expertos que componen el Comité autonómico de Ética e Investigación ha iniciado ya la ponencia 'Ética y Muerte Digna' para analizar los entresijos de la futura Ley.
Montero recordó en rueda de prensa que esta Ley tiene su razón de ser en un derecho reconocido en el Estatuto de Autonomía de Andalucía, por lo que la comunidad "tiene competencias" para regular todos los aspectos relativos al proceso de atención para una muerte digna, a excepción, "lógicamente", de los dos preceptos que el Código Penal tiene tipificados como delito: la eutanasia activa y el suicidio asistido.