(CNS/InfoCatólica) El padre Boniface Ramsey, párroco de la St. Joseph Yorkville en la ciudad de Nueva York, explica a CNS que el 11 de octubre del 2006, recibió una carta del cardenal Leonardo Sandri, entonces azobispo sustituto de la Secretaría de Estado para asuntos generales, solicitando información sobre un sacerdote de la archidiócesis de Newark que estudió en el Seminario de la Inmaculada Concepción y que estaba siendo examinado para un puesto en una oficina del Vaticano.
Mons. Sandri escribió al padre Ramsey:
«Le pregunto con especial referencia a los serios asuntos en los que están involucrados algunos de los estudiantes del Seminario de la Inmaculada Concepción, sobre los que en noviembre de 2000 usted tuvo la amabilidad de informar confidencialmente al entonces Nuncio Apostólico en los Estados Unidos, el difunto arzobispo Gabriel Montalvo».
El P. Ramsey había dado clases en la facultad del seminario de 1986 a 1996 y en el año 2000 mandó una carta al arzobispo Montalvo informándole de las quejas que escuchó de los seminaristas que estudiaban en el seminario, ubicado en South Orange, Nueva Jersey.
En la carta, según asegura el padre Ramsey a CNS, «me quejé de las relaciones de McCarrick con los seminaristas y todo el asunto de acostarse con seminaristas y todo eso; el asunto que todos conocen».
El sacerdote dice que entendió que la razón por la cual la carta del entonces arzobispo Sandri, que ahora es cardenal y prefecto de la Congregación para las Iglesias orientales, solo mencionaba «asuntos serios que involucraban» a seminaristas y no el comportamiento del arzobispo McCarrick, es porque las acusaciones contra el ex cardenal eran «demasiado delicadas».
«Mi carta del 22 de noviembre de 2000 trataba sobre McCarrick y no acusaba a los seminaristas de nada; estaba acusando a McCarrick», explica.
El padre Ramsey afirma que nunca recibió una respuesta formal a la carta que envió en el año 2000, pero que está seguro de que tal carta fue recibida, porque la carta que le llegó del arzobispo Sandri en 2006 reconoce las acusaciones que él había planteado en el año 2000.
La carta de 2006 no solo confirma comentarios anteriores hechos por el P. Ramsey, sino también parte de las acusaciones planteadas recientemente por el Arzobispo Carlo María Vigano, Nuncio en los Estados Unidos de 2011 a 2016.