(InfoCatólica) 17 fieles católicos fueron asesinados el pasado primero de enero, cuando salían de una Misa de Año Nuevo en la localidad de Omoku, en el estado de Rivers, en el sureste de Nigeria.
Se sospecha que los atacantes armados podrían pertenecer a alguna de las sectas que operan en Port Harcourt. La investigación de los hechos ya ha comenzado y de momento ningún grupo se ha atribuido la autoría del atentado.
El gobernador de Rivers, Nyesom Wike, ofreció una recompensa de 556.000 dólares a quien pueda ofrecer información relevante sobre los asesinos. Rivers es una zona rica en petróleo en la que operan diversos grupos armados.
Con información de Agencias.