(DyN) «No es coherente hablar de la vida y propiciar el aborto», sostuvo al rechazar el proyecto para despenalizar esta práctica durante las primeras 12 semanas de gestación presentado ayer por 70 legisladores de diferentes bloques en la Cámara de Diputados.
Arancedo pidió evitar argumentos «dualistas» e insistió en asegurar que en estos casos «no hablamos de una vida sino de dos, la de la madre y su hijo, ambas merecen ser cuidadas y respetadas».
El prelado recordó que la protección de la vida en gestación es un derecho humano y como tal es «universal, inviolable e inalienable» y que su respeto tampoco depende «de la voluntad o libertad de una persona, ni reside en el poder del Estado».
La libertad no es un principio absoluto
Monseñor Arancedo cuestionó a quienes fundamentan los proyectos de aborto desde la libertad de la madre y la «libre decisión», al afirmar que la libertad «no es un principio absoluto, sino una determinación personal y voluntaria que debe reconocer su límite cuando los derechos de otro aparecen, como en este caso, la vida concebida, que se convierte en una realidad vinculante».
El proyecto
El proyecto presentado ayer está firmado por la presidenta del bloque del Frente para la Victoria, Juliana Di Tullio, y varias legisladoras de esa banca, además de diputados de la oposición.
La iniciativa, que fue analizada en comisión en noviembre de 2011 pero no obtuvo dictamen que habilite su tratamiento en el recinto, y en otro intento en 2005 perdió estado parlamentario, fue elaborado por más de 300 organizaciones en torno a la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
En el texto se reconoce el derecho de la mujer a matar a su hijo no nacido durante las primeras 12 semanas de gestación y habilita el acceso al aborto gratuito en el sistema de salud público y privado, sin autorización judicial previa.
La iniciativa prevé que sólo se podrá abortar fuera del plazo fijado si el embarazo es producto de una violación, en caso de que represente riesgo para la salud de la madre o si existiesen malformaciones fetales graves.