(EP) Alcazar explica que su centro de referencia está ahora en París y que, por el momento, son entre 15 o 20 activistas en España.
Tras asegurar que han sido tratadas con «bastante brutalidad» tras la protesta de ayer en el Congreso y que les han quedado marcas, ha explicado que sus compañeras, de nacionalidad francesa, han sido trasladas a los juzgados de Plaza de Castilla, donde prestan declaración, acusadas, como ella, de un delito de alteración del orden público.
«Nosotras no queríamos intervenir o crear un disturbio dentro de la actividad parlamentaria sino simplemente expresar nuestro desacuerdo con la medida con el señor ministro de Justicia, Alberto Ruíz-Gallardón, quiere proponer para que las mujeres estén esclavizadas al servicio de su moral con su reforma de la Ley y eso es lo que hemos hecho, una protesta pacífica», ha añadido.
Pretende que sea sagrado el derecho a matar a los no nacidos
En la misma línea ha explicado el lema de su protesta 'el aborto es sagrado': «Si para Gallardón es sagrado el catolicismo y es sagrada su moral, para nosotros lo que es sagrado es la vida y la decisión de una mujer sobre su propio cuerpo». Al mismo tiempo, ha insistido en que van a seguir luchando, sin importar lo que diga la opinión pública, la derecha o la izquierda.
Tras realizar dos acciones ante embajadas de Ucrania y Túnez, con menor repercusión, Alcázar considera que esta tercer era «completamente» necesaria porque se está «poniendo en peligro la libertad de las mujeres en España. «Por su puesto, vendrán más acciones», ha añadido.
Usan su cuerpo como objeto de protesta
Además, ha defendido utilizar el cuerpo para llevar a cabo estas protestas: «Nuestro cuerpo no es un objeto erótico, es un objeto de protesta, es un contexto político. Están liberados de cualquier sentido patriarcal son usado para nosotras, para uso y disfrute y para nuestras reivindicaciones».
Finalmente, a quienes consideran respulsivo este modo de protestar, la activista a respondido que lo que es «respulsivo» es que «no se tenga en cuenta la opción de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos, sobre sus vidas». «No vamos a doblegarnos ante la opinión de un partido fascista, derechista y misógino», ha dicho en referencia al PP, al tiempo que ha asegurado que no quieren desacreditar ningún otro tipo de protesta feminista y que el suyo es solamente uno más.